El BCE ha subido los tipos de interés en cada una de sus siete últimas reuniones para combatir el histórico aumento de los precios al consumo, y los dirigentes monetarios han señalado que se producirán nuevas subidas a medida que aumenten las presiones inflacionistas. Sin embargo, el banco ralentizó el ritmo de subidas a 25 puntos básicos la semana pasada, el menor incremento desde que comenzó el endurecimiento el pasado mes de julio, y argumentó que las medidas anteriores aún están haciendo mella en la economía y que la inflación general ya ha pasado su punto álgido.
«Basándonos en los datos de hoy, tendremos que seguir subiendo los tipos de interés durante más tiempo del previsto», dijo en un blog Kazimir, el jefe del banco central de Eslovaquia. «Por tanto, ralentizar el ritmo a 25 puntos básicos es un paso que nos permitirá subir gradualmente durante más tiempo, en caso de que sea necesario y lo justifiquen los datos entrantes», añadió.
Actualmente, los mercados calculan otros 40 puntos básicos de subidas en el tipo de depósito del 3,25% del BCE, lo que indica que los inversores prevén al 100% otro movimiento, pero están divididos sobre los pasos posteriores, e incluso anticipan recortes de tipos a principios de 2024. Esto parece contrastar con las opiniones de algunos dirigentes monetarios que hablan de subidas de tipos en plural y sostienen que, una vez que los tipos alcanzan su nivel máximo, deberían mantenerse ahí durante algún tiempo.
El BCE prevé que la inflación caiga por debajo del 3% en el último trimestre de este año, y que tarde casi dos años más en volver a su objetivo del 2%. Parte de la preocupación radica en que las elevadas presiones subyacentes sobre los precios y el crecimiento relativamente rápido de los salarios nominales mantendrán la presión al alza sobre los precios durante algún tiempo. «La evolución de la inflación subyacente, la continua acumulación de presiones salariales y los elevados márgenes de beneficios exigen vigilancia y reconfirman la necesidad de continuar por nuestra senda», dijo Kazimir.
«Nuestras previsiones de septiembre serán la fecha más temprana para responder a la eficacia de nuestras medidas y a si la inflación se acerca al objetivo», señaló.