Así lo apuntan fuentes familiarizadas con el asunto citadas por ‘The Wall Street Journal’, que señalan que las conversaciones están tan avanzadas que el acuerdo podría cerrarse en los próximos días.Si finalmente se lleva a cabo, esta adquisición sería la mayor que lleva a cabo Exxon desde su acuerdo de 81.000 millones de dólares que le llevó a comprar Mobil en 1998, y ampliaría su presencia en una de las regiones más lucrativas de la zona petrolera de Estados Unidos. Y es que Pioneer es el tercer mayor productor de petróleo en la cuenca del Pérmico después de Chevron y ConocoPhillips. Esa cuenca, que se extiende por Texas y Nuevo México, es la más codiciada por la industria energética estadounidense debido al coste relativamente bajo para extraer petróleo y gas de ella.
WSJ ha apuntado que Exxon tiene mucho efectivo en caja tras haber registrado ganancias récord de 55.700 millones de dólares el año pasado, gracias a los altos precios del petróleo y el gas. De hecho, terminó el ejercicio con 29.600 millones en efectivo. La adquisición de Pioneer le daría a Exxon más tierras productoras de petróleo ya establecidas con las que poder aumentar la producción cuando sea necesario, en lugar de arriesgar dinero en el desarrollo de áreas no probadas. De hecho, recuerda ‘Reuters’, la propia Pioneer se ha fortalecido a través de acuerdos, entre los que destacan las adquisiciones de sus rivales estadounidenses de esquisto DoublePoint Energy por 6.400 millones de dólares en 2021 y Parsley Energy por 7.600 millones de dólares en 2020.
Exxon tiene una capitalización de mercado de alrededor de 446.000 millones de dólares, mientras que Pioneer está valorada en alrededor de 50.000 millones de dólares.