De esta forma –durante un acto en Melilla junto al presidente de esta ciudad autónoma, Imbroda– el líder de los ‘populares’ ha manifestado que «España no merece la degradación que estamos viviendo», y que la intervención de Díez «no es una anécdota, ni si quiera un circo», sino que lo «de hoy es una señal más de que el PSOE está en caída libre». «Un PSOE atrapado, un PSOE devorado por la degradación moral, la degradación institucional y la degradación ética», ha apostillado.
El también jefe de la oposición ha asegurado «que esta situación no se puede prolongar más», debido a que «España no es un vertedero televisivo, cutre y sórdido, como hemos visto hoy en una rueda de prensa en Madrid». En este contexto, ha subrayado que «hemos de limpiar la vida pública» con «determinación», y –respecto a una convocatoria de elecciones– ha indicado que «hemos de devolver la palabra al pueblo español».
Igualmente, Feijóo ha acusado al PSOE de haber «cruzado todos los límites de la indecencia y de la inmoralidad», a la vez que expresado que «la Justicia también dirá si también ha cruzado los límites de la legalidad». Así, ha manifestado que «ningún Tezanos, ningún García Ortiz ningún Conde-Pumpido ni ninguna Leire nos va a convencer de que una mentira es verdad, que un incumplimiento es tener palabra, de que las cesiones son principios, y de que los privilegios son justos».
«La realidad es que este Gobierno se ha desconectado de los problemas de la gente. Su cabeza está en sobrevivir en su escándalo diario», ha añadido.
Respecto al hecho de que el comisionista del caso PSOE Víctor de Aldama haya irrumpido tras la comparecencia de Díez para acusarla de «mentirosa», el líder de los ‘populares’ ha afirmado que en su formación «no tenemos compromisos con nadie». Por ende, ha destacado que «no tenemos Leires que hagan una rueda de prensa con un vergonzoso mensaje, y que se levante otro del público a decir ‘estás mintiendo, estás protegiendo a Sánchez, y ten mucho cuidado con lo que dices porque yo también puedo decir muchas cosas sobre Sánchez’». «Es una verdadera vergüenza», ha zanjado.