Las dos entidades han renovado su colaboración para poner en marcha la segunda convocatoria de esta iniciativa de Fundación Naturgy, que tiene como objetivo poner foco en la innovación como uno de los ejes principales de la transición energética y avanzar en la descarbonización de la economía en nuestro país.
El CSIC coordinará la comisión científica evaluadora de los proyectos que se presenten al premio, cuya convocatoria estará abierta hasta el 18 de febrero de 2024. Un jurado de prestigio presidido por Eloísa del Pino, presidenta del CSIC, fallará el premio el próximo mes de junio en Madrid. Del Pino ha declarado que “la transición energética es un reto que nos apela a todos, tanto a las empresas como al estado”.
Por su parte, la directora general de Fundación Naturgy, María Eugenia Coronado, ha mostrado su satisfacción por esta nueva edición del premio, ya que “es fruto del éxito con el que la comunidad científica en España recibió la primera convocatoria. A día de hoy, cuando los ganadores de la primera edición del Premio Fundación Naturgy-CSIC están a las puertas de entregar los primeros resultados de su investigación, estamos plenamente convencidos de la idoneidad de una iniciativa como esta”.
El ganador de la primera edición del premio fue un proyecto del Instituto de Bioeconomía de la Universidad de Valladolid (IB-UVA), liderado por el investigador Ángel Martín Martínez, que propone una tecnología innovadora en el ámbito de los procesos de captura y reducción de CO₂. Desde la entrega del premio, el pasado mes de junio, la investigación del proyecto se desarrolla favorablemente y el equipo de del IB-UVA presentará un primer informe el próximo mes de diciembre.
Con esta segunda edición, Fundación Naturgy quiere seguir sumando a favor de la investigación y el desarrollo científico en el ámbito de la energía, con el objetivo de alcanzar los objetivos de emisiones nulas netas de España y de la UE.
Este reconocimiento está dirigido a proyectos desarrollados por organismos de investigación públicos o privados, sin ánimo de lucro, incluyendo universidades públicas y privadas (inscritas en el Registro de Universidades, Centros y Títulos) y otros centros de I+D+I. Asimismo, deben ser grupos que realicen investigación fundamental o desarrollo experimental, y que tengan personalidad jurídica propia y residencia fiscal en España.
Las candidaturas participantes deben ser proyectos inéditos, de investigaciones en curso o de reciente finalización, y cuyo potencial innovador sea susceptible de ser incorporado al mercado o generar valor en la sociedad. Los proyectos de investigación candidatos podrán tratar los siguientes aspectos de la innovación tecnológica en el ámbito energético: eficiencia, seguridad de suministro, fuentes renovables y medio ambiente.