Garamendi ha reclamado que lo que tiene que «explicar el Gobierno» es si va a implementar esa subida «a los contratos públicos». Así lo ha asegurado el máximo representante de la patronal de empresarios en la rueda de prensa celebrada después de la inauguración del IV Foro Económico Francia-España, en el cual ha participado también su homólogo francés (Medef), Martin.
El presidente de la CEOE ha recordado, que la patronal ya ha expresado cuál es su propuesta para la subida del SMI, que supondría un 3% en 2024 y ese mismo porcentaje en 2025, mientras que no conoce la propuesta del Ejecutivo. Garamendi ha fundamentado su reclamación de que la subida del SMI se aplique a los contratos públicos en que «muchas pequeñas empresas que dan servicios públicos están realmente asfixiadas».
«Es muy fácil subir salarios, pero abstenerse de aplicar la parte que toque», ha lamentado. Garamendi ha declinado valorar la propuesta de reestructuración y el expediente de regulación de empleo (ERE) anunciado este lunes por Telefónica, el líder de la patronal sí ha afirmado que «estas cosas pasan para que la compañía pueda seguir adelante».
Por otra parte, Garamendi y Medef han abogado por una reducción de las normas europeas que, según explican, generan «problemas administrativos» e impiden una unidad de mercado en la Unión Europea que hace perder competitividad a las empresas frente a otros mercados internacionales. «Lo que estamos planteando es una reducción de los problemas administrativos que se generan en Europa, que generan una estructura de unidad de mercado, queremos apostar por esa unidad de mercado, unidad de capitales, el tránsito de personas por los países, igualdad de oportunidades, pensar que en los últimos años hay más de 850 normas europeas que luego se trasladan a los países y nos generan esa rotura de la propia unidad de mercado», ha expresado el presidente de CEOE.
Asimismo, el presidente de Medef ha enfatizado en otro de los retos que aborda el foro bilateral, que es la prioridad de afrontar el reto del cambio climático y la transición energética. «Francia y las empresas francesas están muy convencidas y determinadas a mantener la trayectoria de la neutralidad del carbono en el 2050, y están preocupadas por respetar los acuerdos de París», ha declarado.