La venta del productor de cava catalán se lanzó a principios de año y era uno de los movimientos corporativos más esperados para este 2025. Tras siete años en el accionariado, Carlyle, que ha contratado como asesores a Morgan Stanley y Santander, ha puesto a la venta su 68% del total tras el anuncio de resultados récord en el ejercicio 2023/2024. El ebitda (resultado bruto operativo) se situó, en concreto, en 39 millones de euros, lo que ha supuesto no solo un 15% más respecto a la campaña anterior sino el nivel más alto de toda su historia. El fondo estadounidense, un gigante que tiene 417.000 millones de euros en activos bajo gestión, ha fijado un precio de salida por encima de los 700 millones de euros.
La operación se encuentra todavía en una fase inicial, con el reparto de la información a los potenciales interesados y sin que todavía se esté negociando en firme con ningún candidato. Por ello, abren la posibilidad de que el inversor estadounidense esté dispuesta a desprenderse de algunos activos particulares, como puede ser Bodegas Bilbaínas o las bodegas de Napa Valley.
El grupo ha cerrado el ejercicio 2024-2025 con un nuevo resultado récord tras registrar un beneficio operativo (ebitda) de 44 millones de euros. Por su parte, la facturación bruta se situó en 232 millones de euros, un 3% más interanual, a tipo de cambio constante. La facturación neta fue de 195 millones de euros, equivalente a un crecimiento del 4% -también a cambio constante-.
La otra operación en marcha, la de Bodegas Faustino es más reciente. La familia Martínez-Zabala, propietaria de la empresa, ha encargado la venta al banco de inversión Rothschild, según adelantó el pasado 30 de octubre El Confidencial. Al igual que ocurre con Codorníu, Faustino es una empresa completamente saneada que cerró su último ejercicio con ventas cercanas a los 240 millones de euros y un ebitda de 50 millones, el mejor resultado de su historia reciente.
Fuentes próximas a García Carrión confirman ahora el interés en ambas empresas a la espera de que se tome la decisión de presentar una oferta por una de ellas. El gigante bodeguero de la familia García Carrión, presente en distintas denominaciones de origen, es propietario de marcas de vino como Antaño, Pata Negra, Mayor de Castilla, Señorío de los Llanos, Viña Arnaiz o Jaume Serra, además de los zumos, caldos, cremas y sangrías Don Simón.
La empresa tiene capacidad financiera y ha amortizado en los últimos tres años, antes de la refinanciación, cerca de 200 millones, cumpliendo con todos los compromisos fijados con la banca acreedora. Tras el acuerdo alcanzado con Caixa, Santander, BBVA y Rabobank ha extendido el vencimiento del crédito sindicado de noviembre de 2026 a marzo de 2031 en unas condiciones más ventajosas y con criterios, además, ESG. Es un acuerdo que contempla, asimismo, una nueva línea adicional, no dispuesta por el momento, de otros 40 millones de euros.
García Carrión cerró el último ejercicio con un resultado después de impuestos de 52,4 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 7,6% respecto al año anterior. En la misma línea también, sus ingresos han aumentado un 1,6%, hasta 1.161 millones de euros, lo que supone que desde 2010 el grupo ha duplicado su tamaño. En el informe de gestión adjunto a las cuentas, J. García Carrión, que suma más de 1.200 empleados en su equipo, asegura que ha seguido en el último año 2024 «reforzando y consolidando su posición de liderazgo entre las empresas del sector agroalimentario dedicadas a la elaboración y comercialización de vinos (de mesa y denominación de origen) y zumos». En este sentido, recuerda además que en los últimos ejercicios ha realizado «proyectos de mejora y ampliación de las diversas instalaciones que dispone», con «una estrategia centrada en la apuesta por los productos de mayor valor añadido y la mejora de la eficiencia y la contención de gastos superfluos».
Como consecuencia de esta política se ha obtenido un ebitda al cierre del ejercicio de 144 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 9% respecto a los 132 millones de euros que había obtenido en el año anterior.
