Este resultado tiene su origen en la eficiencia productiva, la innovación y la exportación por la que apuesta la galletera, sumado a la reinversión del beneficio, lo que permite desarrollar su capacidad y llegar a más mercados. Gracias a esta combinación y fruto de la política de expansión Galletas Gullón cierra 2024 con un balance que supera los 300 millones de euros en exportaciones, lo que representa el 44% del total de facturación, dos puntos porcentuales más que el año anterior.
Con estas cifras, la venta al exterior se ha convertido en una de las principales palancas de crecimiento de la galletera aguilarense, poniendo en la actualidad especial foco en las áreas geográficas de Europa, el arco mediterráneo y la región Asia-Pacífico.
Bajo esta premisa y tras la evolución de las exportaciones de la compañía en las últimas décadas, las previsiones de Galletas Gullón buscan alcanzar un hito: que las exportaciones para 2030 superen las ventas nacionales.
Con este objetivo, la compañía ha comprometido una inversión para 2025 y 2026 de 20 millones de euros para ampliar su capacidad logística y almacenamiento de materias primas y material auxiliar. A ello se une otra inversión comprometida en cinco líneas de producción para la fábrica de VIDA 2, que entrarán en funcionamiento a lo largo de 2026.
El fuerte compromiso de Galletas Gullón con el empleo de calidad ha hecho posible que, en 2024, la galletera haya superado los 2.100 puestos de trabajo directos en el mundo rural apoyando así la retención del talento y evitando la despoblación, generando un millar de empleos en siete años.