Cada proyecto generará más de 100 empleos verdes, incluyendo las fases de construcción y explotación. La tecnología de almacenamiento a través de baterías se está volviendo cada vez más importante por permitir maximizar el uso de energía limpia, regulando la frecuencia de red en un milisegundo y proporcionando una capacidad de respaldo en los periodos de mayor consumo.
Las seis nuevas baterías que construirá la compañía han sido reconocidas como Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE), en su división de energías renovables, hidrógeno verde y almacenamiento (ERHA) y contarán con 37,5 millones de financiación.
Las baterías tendrán tecnología Ion-Litio, la más extendida en la actualidad dada su relación entre prestaciones, madurez tecnológica y coste. Estos sistemas se instalarán como tecnología hibridada junto con fuentes renovables de energía, en este caso con la solar, por lo que la planta fotovoltaica y la batería compartirán el mismo punto de conexión. En concreto, los proyectos se construirán en Castilla y León, Extremadura, Castilla La Mancha y Andalucía, y cada batería contará con 25 MW de potencia y una capacidad de 50 MWh.
En Castilla y León, se instalará una batería en Revilla Vallejera (Burgos), donde Iberdrola finalizó en 2023 su primera planta híbrida eólica y solar de España. Extremadura, por su parte, tendrá dos nuevas baterías. En la provincia de Cáceres, donde se ubican las plantas fotovoltaicas C. Arañuelo I y II, la compañía instalará dos baterías.
En Castilla La Mancha, en los municipios de Valverdejo, Alarcón y Olmedilla de Alarcón (Cuenca), donde Iberdrola cuenta con parques solares, se instalarán dos baterías.
La sexta batería se construirá en Huelva, en el municipio de Puebla de Guzmán donde Iberdrola cuenta con la planta fotovoltaica de Andévalo, primera instalación construida con el Certificado UNEF de Excelencia.
En noviembre de 2019, Iberdrola inauguró el primer sistema de almacenamiento de energía eléctrica con baterías de ion de litio para redes de distribución en España. El proyecto, pionero en el país y situado en el municipio murciano de Caravaca de la Cruz (Murcia), permite mejorar la calidad de suministro energético del entorno, así como el aprovechamiento de la energía solar generada en la zona. Además, Iberdrola también fue pionera en la instalación de baterías junto a fuentes renovables. Es el caso de la instalación de Campo Arañuelo III, que fue la primera batería conectada a un proyecto fotovoltaico.
Por su parte, la batería de Puertollano, con una capacidad de 20MWh, almacena la producción obtenida de una planta solar cercana para generar el hidrógeno verde de la mayor planta de esta fuente de energía para uso industrial de Europa.
La compañía también cuenta en Abadiño (Vizcaya) con un sistema stand-alone, que permite conectarse directamente a la red y funcionar sin necesidad de estar conectada a una instalación. De este modo, consigue descongestionar la red y almacenar la energía sobrante en momentos de máxima generación para poder utilizarla cuando es más necesaria. En concreto, esta batería está conectada en la evacuación del parque eólico Oiz.
También en País Vasco, Iberdrola cuenta con la primera batería de España que almacena la energía del viento en el parque eólico Elgea-Urkilla.