Estados Unidos es un país clave para la energética española por sus activos energéticos de calidad, un entorno empresarial favorable y su potencial de crecimiento.Con más de 800 empleados en el país, Repsol opera en el negocio de exploración y producción de hidrocarburos, con una producción de cerca de 190.000 barriles equivalentes de petróleo al día, una tercera parte del total de la compañía, a la que se incorporarán los activos Leon-Castile y Pikka este año.
Además, está presente en renovables en el país desde 2021, cuando desembarcó con la adquisición del 40% de Hecate Energy. La compañía cuenta con más de 2.000 megavatios (MW) de capacidad solar y eólica instalada y en fase de construcción. El grupo comenzó a producir electricidad con su primer proyecto solar en Estados Unidos, en Nuevo México, en 2022.
Asimismo, la reunión entre el ejecutivo de Repsol y el secretario de Estado de Energía de Estados Unidos se produce después de que el pasado 27 de mayo expirara la licencia operativa para la producción de petróleo en Venezuela, tras la revocación por parte de la Administración de Donald Trump para un grupo de empresas internacionales, entre las que se encuentra la española.
Repsol está presente en Venezuela a través de sus participaciones en entidades licenciatarias de gas (Cardón IV, etc.) y en empresas mixtas de crudo (Petroquiriquire y otras).