Esta tasa de cobertura, actualizada el 16 de agosto, se ha enmarcado en un 2023 marcado por el endurecimiento de las condiciones de financiación ante la progresiva subida de tipos de interés que está llevando a cabo el Banco Central Europeo. Con este panorama, el departamento liderado por Nadia Calviño defiende la estrategia de financiación del Tesoro “prudente, flexible y equilibrada”, que le permite mantener un acceso “sólido” a los mercados de capitales y una “fuerte” demanda por parte de los inversores.
“Como prueba de ello, a 16 de agosto ya se ha cubierto el 73% de toda la financiación a medio y largo plazo prevista en 2023 y se mantiene contenido el coste medio de financiación, que para el conjunto de la deuda pública se sitúa en el 2%”, remarca el texto.
Los datos de cobertura de financiación y del coste de la deuda se han dado a conocer con motivo de la presentación al Consejo de Ministros de la Memoria Anual sobre la Política de Endeudamiento Público. La vicepresidenta Calviño, ha sido la encargada de presentar el documento. En el texto se constata que la emisión de deuda neta se redujo en 5.000 millones durante 2022, situándose en los 70.063 millones de euros. En términos brutos, la emisión se situó en 232.570 millones. Entre otros puntos, el Gobierno destaca la reducción en las emisiones de deuda en un contexto de “buen comportamiento” de la economía, una mejora de los ingresos públicos y “prudencia” en las estimaciones sobre el programa de financiación a comienzos de año.
Otro apunte que deja la memoria es que en 2022 se redujo la ratio deuda sobre PIB en cinco puntos, hasta el 113,2%, lo que supone dos puntos menos que las previsiones recogidas en los presupuestos para dicho ejercicio. El Ministerio subraya que en 2022 el Tesoro mantuvo un “sólido” acceso al mercado, con una demanda “muy superior” a la cantidad emitida y una elevada participación de inversores no residentes, que se mantuvo estable en el entorno del 40%. Las cuatro sindicaciones de Obligaciones del Estado celebradas en 2022 despertaron un especial interés entre inversores internacionales (más de un 80% del volumen adjudicado).
Asuntos Económicos resalta que por otro lado las principales agencias de ratings mantuvieron la calificación crediticia de España durante 2022, al igual que ocurrió en 2021 y en la estabilidad de la prima de riesgo en niveles similares al período de prepandemia, en el entorno de los 100 puntos básicos. Este conjunto de elementos permitió que el coste medio de la deuda en circulación aumentara en nueve puntos básicos hasta el 1,73% a cierre de 2022, unos niveles, dice Economía, “muy contenidos” en términos históricos, en un contexto de súbito incremento de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo. De su lado, la vida media de la Deuda del Estado en circulación se situó en 7,9 años.