Según el simulador de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el recibo de un usuario con una potencia de 4,4 kilovatios (kW) y un consumo mensual de 60 kilovatios hora (KWh) en horario punta, 70 KWh en llano y 120 KWh en valle, será de 57,19 euros, el más alto de 2024, superando al de enero. Además, la factura de la luz de este mes de agosto es superior en un 9,62 % al de julio y un 3,75 % más caro que el de agosto de 2023, aunque en este último caso se aplicaba un IVA del 5 % para paliar el encarecimiento de la luz por la crisis energética, que decayó al finalizar el año para pasar a ser del 10 %.
Para encontrarse una factura más alta que la de este mes de agosto hay que remontarse a febrero de 2023, en que su importe para ese consumidor medio fue de 64,88 euros, un 11,85 % más que ahora. Además, estará un 42,57 % por debajo de los históricos niveles de julio de 2022, cuando alcanzó los 99,59 euros en plena crisis energética tras la invasión rusa de Ucrania.
En agosto, el precio medio de la electricidad en el mercado mayorista, una de las referencias para los consumidores con tarifa regulada, ha rebasado los 90 euros/megavatio hora (MWh) y se ha convertido en el mes más caro en casi un año.
Ello hará que se siga aplicando el IVA reducido del 10 %, al no superar los 45 euros/MWh, que haría que pasara, como ya ocurrió en marzo, abril, mayo y junio al 20 %. El precio del megavatio hora ha sido en agosto de 91,05 euros, un 26 % superior al de julio, que, hasta ahora, era el segundo mes del presente ejercicio -tras enero- con la luz más cara.