De esta forma, los ingresos por cotizaciones sociales siguen marcando máximos históricos en términos absolutos y también registran el mayor incremento en los últimos 16 años en los primeros seis meses del año. Si se descuentan los ingresos correspondientes al Mecanismo de Equidad Intergeneracional, en vigor desde el pasado 1 de enero, el incremento de las cotizaciones sociales sería del 8,2% interanual.
En su conjunto, las cuentas de la Seguridad Social presentan un saldo positivo, a 30 de junio de 2023, de 14.007 millones de euros, equivalentes un 1% del Producto Interior Bruto (PIB). Esta cifra se obtiene de la diferencia entre unos derechos reconocidos por operaciones no financieras de 104.244 millones de euros, que muestran un incremento del 11,5%, y obligaciones reconocidas de 90.237 millones, que crecen un 8,7% interanual.
En términos de caja, la recaudación líquida del sistema alcanza los 103.050 millones de euros, con un incremento del 11,5% respecto al ejercicio anterior, mientras los pagos presentan un aumento del 8,4%, hasta alcanzar los 89.893 millones de euros.
En estos seis meses, las cotizaciones sociales ascienden a 75.942 millones de euros, lo que supone un incremento del 10% respecto a los ingresos del mismo periodo del ejercicio 2022 (6.891 millones de euros más).
Este comportamiento viene impulsado por la evolución de las cotizaciones de ocupados, que experimentan un incremento interanual del 10%, hasta alcanzar los 71.338 millones de euros (6.506 millones de euros más), debido al buen comportamiento del empleo en el primer semestre del año.
Además, las cotizaciones de desempleados se cifran en 4.604 millones de euros, lo que representa un aumento del 9,1% (385 millones de euros más)
Las transferencias recibidas por la Seguridad Social ascienden a 27.657 millones de euros, con un aumento del interanual 15,9%. La partida más significativa correspondiente a las transferencias recibidas del Estado y Organismos Autónomos que suma un total de 25.444 millones (un 17,6%).
Gastos no financieros
Por el lado del gasto, las prestaciones económicas a familias e instituciones alcanzaron 84.641 millones, un 9,1% más que en el mismo periodo de 2022. Esta cifra representa un 93,8% del gasto total realizado en el sistema de Seguridad Social.
La mayor partida, 77.470 millones, corresponde a pensiones y prestaciones contributivas, con un aumento de un 8,9%.
En un análisis detallado del área contributiva, el gasto en pensiones (incapacidad permanente, jubilación, viudedad, orfandad, en favor de familiares y complementos de pensiones contributivas para la reducción de la brecha de género) se incrementa un 10,5% hasta los 68.541 millones de euros, debido al aumento del número de pensionistas (1%), a la subida de la pensión media (9,6%), así como a la revalorización general del 8,5% de las pensiones contributivas en el ejercicio 2023.
Respecto a los subsidios de incapacidad temporal, el gasto total disminuye un 2,1% respecto al mismo periodo del año anterior, hasta alcanzar los 6.577 millones de euros, mientras las prestaciones por nacimiento y cuidado de menor, corresponsabilidad en el cuidado del lactante, riesgo durante el embarazo y durante la lactancia natural y cuidado de menores afectados por cáncer u otra enfermedad asciende a 1.970 millones (un 6,3% más).
Las pensiones y prestaciones no contributivas, incluidos los complementos por mínimos de las pensiones contributivas, alcanzan los 7.171 millones de euros, un 11,1% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior, motivado fundamentalmente porque se mantiene el incremento extraordinario del 15% en las pensiones de jubilación e invalidez en su modalidad no contributiva e Ingreso Mínimo Vital (IMV) que se viene aplicando desde julio de 2022.