Los acontecimientos se han precipitado en el foro que se reúne todos los años en Davos, después de que el histórico fundador del foro, de 90 años, chocase con el consejo del organismo el pasado mes de abril, tras recibir una acusación de malas prácticas y corrupción. Según Bloomberg el problema es que se abre un hueco de dos años, entre la dimisión del expresidente, y la disponibilidad de la presidenciable. Los planes de Schwab y del consejo eran no jubilarse hasta ese momento, pero las acusaciones de corrupción se han echado encima del fundador del Foro.
Schwab (1938, Ravensburg, Alemania), ha estado al frente del Foro de Davos desde su fundación, en el año 1971. Durante cinco décadas ha conseguido construir el foro económico más importante del planeta, en el que se reúnen las principales personalidades del mundo económico y político para debatir temas como la pobreza o el cambio climático. El foro ha tenido que hacer frente a duras críticas en los últimos años por la propuesta que presentó Schwab en 2020, «El Gran Reinicio», para reconstruir la economía de forma sostenible tras la pandemia de Covid-19, y recientemente, el mandato de Schwab se ha puesto en peligro por las acusaciones de ha recibido el presidente.
El perfil de la presidenta del BCE era considerado perfecto por parte del Gobierno, para enfrentarse a la reforma del Foro que se considera que deben acometer tras la salida Schwab. Además, Lagarde tiene un buen currículum, tras haber sido la primera mujer en dirigir el ministerio de Finanzas de Francia, en presidir el Fondo Monetario Internacional, y en presidir el Banco Central Europeo.