El hecho se produjo al aprobar la ley de desperdicio alimentario eliminando tres enmiendas del Senado con la única voluntad de la Mesa, al aceptar el veto del Gobierno, y no someterlo al pleno, según denuncia en un escrito enviado a los grupos parlamentarios, La letrada advierte de la inconstitucionalidad del procedimiento.
Esta nota refleja el conflicto abierto entre el Senado, con mayoría absoluta del Partido Popular, y el Congreso de los Diputados, donde el PSOE y Sumar controlan la Mesa que preside la socialista Francina Armengol. En la Cámara Baja cuentan con el apoyo del Secretario General, Galindo, afín al PSOE, que se opuso verbalmente a la eliminación de estas enmiendas.
La letrada mayor asegura que «por primera vez en nuestra historia constitucional, la Mesa de una de las Cámaras, a causa de un acuerdo del Gobierno, no respeta, tal cual es remitido, el texto aprobado por el Pleno de la otra y decide, sin base constitucional alguna, someter a debate y votación del Pleno del Congreso un texto distinto al enviado por el Senado, un texto mutilado y, por tanto, alterado sustancialmente».