“El acuerdo garantiza el poder adquisitivo de la plantilla”, destacan las partes firmantes del convenio, que entrará en vigor el 1 de enero de 2024 y tendrá una duración de cinco años, hasta finales del 2028. En concreto, la subida del salario base se vincula al IPC, hasta un 2,5%, y, en caso de ser superior, Mercadona completará este incremento hasta un máximo del 6%, porcentaje vinculado a los objetivos del beneficio de la empresa. “Se trata de una medida acorde con el modelo de creación de riqueza y reparto de beneficios compartidos que viene aplicando desde hace años la compañía”, apuntan las partes.
El incremento del salario base se vincula al IPC, hasta un 2,5%, y, en caso de ser superior, se completará este incremento hasta un máximo del 6%, vinculado a los objetivos del beneficio de la compañía Además, Mercadona ya garantiza un sueldo mínimo de entrada de 1.507 euros brutos al mes (un 20% más que el salario mínimo interprofesional), al que se suman, entre otros, los complementos propios de la política retributiva de la compañía que suponen incrementos de un 11% anual hasta el tramo 5, y que puede llegar a representar un 60% más sobre el salario mínimo interprofesional.
Por otro lado, la compañía avanza en las políticas de conciliación, ya que en este nuevo convenio se hace extensible a los trabajadores de las colmenas (almacenes exclusivos para la venta online) y de los bloques logísticos el descanso de ocho fines de semana al año. Esta iniciativa entrará en vigor de forma progresiva en 2024 y finalizará en 2025, lo que supondrá que esta medida alcance a la mayoría de su plantilla. Asimismo, Mercadona se ha comprometido a reducir la jornada laboral en 2025.