Así, el S&P 500 se revalorizaba un 1,06% frente al +0,74% del Nasdaq 100 o el +0,32% del Euro Stoxx 50. Por su parte el Ibex 35 experimentó una ligera corrección de un -0,13%. Hay que destacar una semana más que el S&P 500 volvía a marcar un nuevo máximo histórico en los 6.044.17 puntos, su 53º máximo histórico del año.
En renta fija, tras la fuerte reacción que llevaba la rentabilidad de los bonos a máximos de varios meses como reacción al resultado electoral en EE.UU., nos encontramos con un movimiento correctivo con las tires a la baja por tercera semana consecutiva. El Treasury a 10 años se dejaba 23 puntos básicos frente a los 16 del Bund y los 18 del Bono español, que cerraban la semana en el 4,18%, 2,09% y 2,79% respectivamente. En el caso del Bono español, no se veía un nivel tan bajo de rentabilidad desde diciembre del año pasado.
En los mercados de materias primas se produjeron correcciones generalizadas. Por un lado, el oro caía un 1,61% para cerrar la semana en 2.681 USD/Oz, los altos precios alcanzados desde principios de año parecen estar pasando factura en estos niveles. Por su parte, y apoyado por una mayor calma en Oriente Medio, estamos viendo cómo se reduce la prima de riesgo sobre el Brent que cedía casi un 3% hasta los 72,94 USD/b. Queremos destacar que la producción manufacturera china se expandió por segundo mes consecutivo, las señales de recuperación de la industria en China podrían dar lugar a un aumento del precio en ciertas materias primas que han estado afectadas por el bajo nivel de actividad económica en la segunda mayor economía mundial.
En el frente macroeconómico, los últimos 5 días no nos dejaron muchas referencias, pero las que conocimos tuvieron su impacto.
En China el PMI manufacturero se mantuvo por segundo mes consecutivo en zona de expansión y esta semana conoceremos el PMI Caixin (la encuesta privada) para el que espera cierto crecimiento en el mes, pero con un sector servicios que puede estar algo más presionado.
En Europa conocimos los datos del IPC que estuvieron en línea con lo esperado, es decir un repunte desde el 2% hasta el 2,3% a nivel general, mientras que el IPC subyacente se mantuvo en el 2,7% cuando se esperaba una ligera subida hasta el 2,8% (esto apoyaría una nueva bajada de tipos por parte del BCE). Por su parte, la actividad manufacturera sigue deprimida, el PMI se quedaba en 45,2 puntos frente a los 46 del mes anterior, con una situación política en Francia que podría agravar aún más el problema.
En Estados Unidos se conoció un buen dato de la confianza del consumidor que subía hasta los 111,7 puntos desde los 109,6. El dato del PIB confirmaba un crecimiento del 2,8%, con el mercado laboral en línea con las previsiones y el dato del PCE que se situó en los niveles anticipados por los expertos, 2,3% a nivel general y 2,8% a nivel subyacente, lo que implica una ligera subida respecto a los datos del mes anterior.
Esta semana conoceremos en China el dato del PMI de servicios, en Europa las referencias más importantes serán los datos de empleo, las ventas minoristas y el PIB del tercer trimestre. Por último, en EE.UU. se publicarán las cifras de la tasa de paro y de las nóminas no agrícolas (+202.000) el viernes y que serán clave de cara a la última reunión del año para la FED. Además se conocerán los datos de los PMIs del ISM que apuntan una recuperación del sector manufacturero.