Fue en verano de 2022 cuando aseveró que venían «tiempos complicados» y habló de que la gente se había entregado sin pensar en los momentos económicos que se venían.
El analista se ha explicado en los siguientes términos: «Estamos en el otoño del 2023 y la expectativa de momentos complicados es hoy mucho mayor que entonces, pero en la calle no se nota -en la calle, en las tiendas de alimentación, por ejemplo, si».
Y ha avisado: «Hay quien dice que es porque ‘España está yendo bien’, otros hablan del ahorro acumulado cuando el virus. Lo cierto es que el 65% de aquel ahorro lo acumuló el 20% de las familias, y que el crédito al consumo se ha disparado aún con TAES de casi el 13%».
Becerra concluye: «Pienso que parte de la población ha entrado en un túnel peligroso porque la inflación va a seguir y los tipos no van a caer mañana, por lo que se verá afectada negativamente la ocupación y las rentas salariales cuando la demanda caiga». Por ello, no ha dudado en puntualizar sobre dos asuntos concretos. «Es decir, hoy y ahora, ver las terrazas de los bares a tope y las carreteras colapsadas los fines de semana no es algo positivo».