Sin embargo, el descenso no supone mayor capacidad de ahorro para las familias, ya que siguen pagando mucho más de lo que lo hacían dos años atrás, cuando este índice se ubicaba en el 1,25%. Si se utilizan los niveles de este índice en la actualidad sobre una hipoteca mediana de 300.000 euros a 30 años, con un diferencial del 1%, el desplome es de unos 165 euros menos a pagar mes a mes, lo que implica una reducción en el pago de unos 2.000 euros anuales.
Las personas que se beneficiaran de la bajada en el euríbor son, en particular, quienes tengan una hipoteca a tipo variable que revisen su cuota el próximo mes de octubre. Esto se debe a que, por una parte, este es el índice de referencia que utilizan las entidades bancarias para calcular las cuotas mensuales de este tipo de hipotecas y, por otra, que los efectos de la bajada de los tipos de interés y del euríbor no se nota al instante, sino que pasa un tiempo hasta que surten efecto. De esta forma se presuponen dos meses de decalaje para el cálculo que, de manera generalizada, se realiza una vez al año o cada seis meses.