El texto fija una rentabilidad razonable del 7,09% para la mayoría de las instalaciones primadas y del 7,398% para aquellas que cumplen las condiciones especiales previstas en la Ley 24/2013. De este modo, según las estimaciones del Gobierno, el coste anual de estas tecnologías vuelve a incrementarse en nuestro país tras años de rebajas. Las estimaciones presentadas por el Gobierno prevén que las renovables y la cogeneración reciban 5.908 millones en 2026, frente a los 4.600 millones del año anterior, es decir, un incremento de 1.300 millones de euros, el 28,4% más.
Este incremento tendrá también un impacto en los Presupuestos Generales del Estado. Dado que la Ley establece que los sobrecostes derivados de la actividad de producción de energía eléctrica, cuando se desarrollen en los sistemas eléctricos aislados de los territorios no peninsulares (147,5 millones de euros), serán financiados en un 50 por ciento con cargo a los Presupuestos, se estima que este importe será de 73 millones de euros en el año 2026.
Debido a la coyuntura de mercado con el incremento de los vertidos de energía renovables se ha producido una reducción de las horas de producción reales de ciertas tecnologías. Para analizarla, el Gobierno ha calculado el porcentaje de reducción de las horas de funcionamiento reales en el periodo 2023-2025 en comparación con el periodo de referencia 2017-2022, incluyendo en la muestra de cálculo únicamente las instalaciones que seguirán activas a partir de 2026. Así las horas se reducen en un 29% para la cogeneración, en un 28% para la biomasa; en un 21,8% para las instalación de biogás; un 10,3% para la termoeléctrica; un 9,67% para la eólica y un 8,9% para la fotovoltaica.
La propuesta se somete a información pública tras la última revisión extraordinaria, que tuvo lugar con motivo del inicio del periodo regulatorio 2023-2025.La actualización se apoya en la metodología contenida en el Real Decreto 413/2014 y ajusta tanto la retribución a la inversión como, en su caso, la retribución a la operación para todas las instalaciones tipo del régimen retributivo específico.
Según el documento, el Gobierno prevé precios de mercado de 62,24 euros por megavatio hora en 2026, 59,53 euros en 2027 y 58,78 euros a partir de 2028, lo que refleja un escenario de precios moderados tras la volatilidad registrada en los últimos ejercicios. Estos valores condicionan los ingresos reconocidos a las plantas acogidas al sistema de primas.
La orden incorpora también nuevas instalaciones tipo dirigidas a unidades de pequeña potencia, con el fin de ajustar el cálculo de desviaciones entre precio real y precio estimado. Asimismo, se revisan a la baja las horas equivalentes de funcionamiento en varias tecnologías, en especial fotovoltaica y eólica, para adecuarlas a los nuevos patrones de operación del sistema eléctrico.
El documento recuerda que el régimen retributivo específico se financia principalmente con cargos del sistema eléctrico y que la retribución final dependerá de la evolución efectiva de los precios de mercado. La revisión llega en un momento clave para los inversores del sector renovable, que afrontan un entorno de costes al alza, exigencias regulatorias más estrictas y una menor entrada en el mercado. La fijación de la rentabilidad para los próximos seis años proporciona certidumbre regulatoria, si bien el ajuste de horas y precios de referencia podría reducir los ingresos esperados en algunas tecnologías.
El texto estará en fase de consulta pública durante varias semanas antes de su aprobación definitiva. El periodo regulatorio 2026-2031 comenzará el próximo 1 de enero y será determinante para orientar nuevas inversiones, cerrar proyectos en operación y garantizar la estabilidad financiera del despliegue renovable en la próxima década.

