El fabricante de trenes español presentará mañana sus últimos resultados semestrales tras el visto bueno del consejo a sus cuentas y después de que en el primer trimestre del año multiplicase por más de 4 su beneficio neto, hasta los 10,4 millones de euros.
Según fuentes próximas a la compañía, en esa misma reunión podría volver a plantearse una respuesta a la nueva carta de Skoda Transportation, que la semana pasada insistió en estudiar una combinación de negocios, tras una primera respuesta negativa de Talgo al interés mostrado por la checa hace unas semanas.
Por otra parte, el Gobierno, a través de la Junta de Inversiones Exteriores, que es el organismo que tiene que decidir si aprueba o veta la OPA del grupo Magyar Vagon, comunicó a los húngaros que ha detenido el plazo que tiene para pronunciarse, lo que supone ampliarlo en hasta tres meses.
Tras detener, el plazo acababa en torno al 10 de agosto. Sin embargo, al esperar desde el pasado viernes 26 de julio un nuevo informe de un organismo que la Junta no menciona, el reloj ha vuelto a detenerse hasta un máximo de tres meses, lo que extendería el plazo hasta noviembre. Fuentes cercanas a la operación también han confirmado que el consorcio húngaro también plantea la posibilidad de la entrada de un socio español al capital, con el objetivo de tener el visto bueno del Gobierno a la OPA. No obstante, en ningún caso Magyar Vagon perdería el control de la compañía una vez adquirida, es decir, siempre mantendría una participación mínima del 51%.
En cualquier caso, los socios españoles barajados hasta el momento, CriteriaCaixa o Escribano, no han confirmado que entrar en el capital de Talgo entre en sus planes.
En cuando a posibles socios industriales, CAF habría descartado su interés desde hace ya varios años, al tener una estrategia más orientada a la movilidad urbana sostenible de trenes de cercanías o autobuses eléctricos.
El directivo de Magyar Vagon, Tombor, ya había adelantado esta posibilidad en una rueda de prensa celebrada a principios de julio en Madrid, donde se mostró dispuesto a estudiar cualquier posibilidad, incluida la entada de socios españoles.