Los pasos que se están dando sonde tal calado que pueden hacer que esta España nuestra de hoy, la que tan excepcional y mayoritariamente recibió a su futura reina, – con las excepciones de los cuatro tarados de siempre, que, ¡oh casualidad¡ son los mismos que acompañan a Sánchez en esta locura antidemocrática- se puede enfrentar en mus pocos meses a una situación de toma de poderes por parte de los políticos menos democráticos del espectro español, para volver del revés la democracia del 78 que hace imposible pensar lo que el futuro nos depara, pero desde luego no será bueno.
Si, aunque sea someramente se pasa revista de los acontecimientos de este último mes n o queda mas remedio que afirmar que los pasos dado desde un gobierno en funciones para terminar de domeñar la poder judicial no han sido en balde y hoy es imposible que cualquier movimiento que quiera tomar el ejecutivo no pase sin problemas los filtros que en teoría deberían de detener la deriva bananera que se aproxima, porque si se mira con cuidado es fácil concluir que salvo la institución monárquica, algunos medios de comunicación independientes y las empresas privadas, el resto de poderes e instituciones han sido domeñados por esta especie de marea negra en la que el sanchismo ha convertido todo lo que le estorbaba en sus ambiciones de permanecer en La Moncloa como nuevo rey absoluto con poderes totalitarios sobre haciendas, bienes y personas,
Cuando pase algún tiempo y esta enfermedad haya pasado, se podrá analizar y estudiar la capacidad de mentira y engaño, de silencio y esclavismo en la que estamos viviendo para satisfacer la ambición de una sola persona.