«Hay un juez del Tribunal Supremo que considera que hay indicios y que se debe seguir investigando, así que lo lógico es que el Parlamento conceda el suplicatorio, no entendería muy bien cuál sería la razón», ha defendido en una entrevista en Onda Cero. De hecho, Puente, ha querido remarcar que su principal objetivo respecto al conocido como el ‘caso Koldo’ es que se arroje luz y que se haga «justicia» y por ello cree que si el exministro «la ha hecho, que la pague». «Lo digo con todo el dolor de mi corazón por el aprecio que le puedo tener», ha matizado.
Para el actual ministro, Ábalos «permitió» que en el entorno del ministerio «se moviera gente que era evidente que no debía haber estado ahí» y por tanto son «decisiones políticas muy cuestionables». Además que los indicios en la trama por la compra de las mascarillas son «más sólidos» que las acusaciones del presunto conseguidor de la trama, Víctor de Aldama, contra su actual ministerio y los supuestos contratos que se produjeron durante el mandato de Ábalos, los cuales ha calificado como datos «demasiado burdos» y que buscan «inflar el globo».
«No hay algo que permita tirar del hilo», ha defendido Puente tras explicar que las pruebas presentadas por Aldama ante el juez los 96 contratos de obras públicas a cambio de pago de comisiones ilegales al entonces ministro son «bastante flojitos, bastante irrelevantes o incluso relevante de que no tiene ni pies ni cabeza» porque solo seis de los contratos pertenecen a la época de Ábalos y los ministros «no aparecen por las mesas de adjudicaciones o contrataciones».
De hecho, según ha explicado, en los procedimientos de contratación hay una parte técnica y otra económica. «En la económica no hay margen de discrecionalidad. En la técnica sí. En la época de Ábalos, la mayor parte de adjudicaciones fueron por precio. ¿Dónde está el margen de decisión de ese supuesto favorecedor?», ha preguntado con ironía y ha invitado a analizar «la prueba en su conjunto» y no de forma «aislada».