Nos guste o no, esa es la realidad y ya pueden decir unos y otros que eso no es así que la realidad, tozuda ella, demuestra día tras día que don Carlos es el autentico jefe del Ejecutivo y que Sánchez es una simple marioneta que baila al son de la marcha que desde Waterloo le toca el prófugo y sus siete diputados bien que lo saben y se lo recuerdan una y otra vez para que cumpla todo lo pactado.
Y digo bien, todo lo pactado, porque al fugado de la Justicia le trae sin cuidado que el TC o el TS, que Pumpido o Llerena digan esto o aquello. El tiene un papelito en el que Sánchez le reconoce un serie de cosas y en el que además se compromete a cumplir una serie de temas acordados y negociados entre don Carlos y don Santos, en aquellas fechas el enviado de La Moncloa.
Así que ya se puede poner serio el presi en el Parlamento cada vez Nogueras le recuerda el papelito que a ellos les trae al pairo que se pueda o no se pueda y estirar la goma tanto tiempo puede ser peligroso para el okupa de La Moncloa, así que ojito con lo que negocia y acuerda ZP, cuya cara de bambi esta ya muy vista y probablemente sus argumentos mas que quemados.
Si en estos días no hay fumata blanca entre uno y otro bloque negociador a don pedro se le complica la existencia y el chollo del genocidio tiene sus límites.
Por si fuera poco, la presión que soportan sus dos hombre fieles y su socio el aizcolari empieza a ser demasiado fuerte porque el cerco de la justicia, con su tran tran lento empieza a llegar a los momentos decisivos de tener que tomar una dirección ya mucho mas concreta de acusaciones o sobreseimiento de los expedientes y ese punto es quizá uno de los mas delicados de cualquier proceso. Si el juez instructor va para adelante, como ya se ha dicho en muchas ocasiones la situación cambia, es otra y el imputado empieza a ver la posible condena como una realidad cercana y no un futurible de dudosa llegada y ahí si se quiebran las voluntades.
Si todo eso se “arrejunta” la interrogación de nuestro titular se evapora