Fuentes jurídicas informan de que el magistrado ha desestimado la petición formulada por las acusaciones populares de prisión comunicada y sin fianza, por lo que mantiene las medidas cautelares que ya pesaban contra Ábalos y Koldo, en línea con el criterio de la Fiscalía. Por tanto, continúan la prohibición de salida de España, la retirada del pasaporte y comparecencias quincenales ante el juzgado.
El exministro de Transportes ha llegado poco antes de las 9:30 horas al Tribunal Supremo citado para declarar como investigado tras el registro en su casa de Valencia y el informe de la UCO que le sitúa en la trama de cobro de comisiones a cambio de adjudicaciones de obra pública junto a Koldo y Santos Cerdán. Ábalos ha llegado acompañado de su abogado y no ha hecho ninguna declaración a la prensa, mientras que varios de los presentes le han esperado en la calle al grito de «corrupto» y «putero».
Una vez en sede judicial, Ábalos ha contestado tanto a preguntas de su abogado como del juez y el fiscal, y ha negado haber recibido ningún tipo de mordidas ni haber participado en adjudicaciones irregulares de obras. La Fiscalía apostaba por mantener las mismas cautelares para el exnúmero tres del PSOE. En cambio, las acusaciones populares que dirige el PP habían pedido el ingreso en prisión de Ábalos. «No me reconozco», ha dicho en relación con los audios que obran en el sumario y lo vinculan con esas posibles irregularidades.
Por otro lado, Koldo se ha negado a declarar ante el juez tras pedir ‘in extremis’ posponer la comparecencia de este lunes. El juez Leopoldo Puente ha rechazado este intento de aplazar la declaración del exasesor de Ábalos.