En este sentido, ha dado un paso más con la eliminación de folletos informativos en papel de todas sus oficinas, lo que representará un ahorro anual de más de 71 toneladas de papel. La eliminación de esta documentación equivale a casi un millar de árboles que harían falta para su producción.
A partir de este momento, los empleados de las oficinas podrán compartir al instante toda la información actualizada en formato digital con los clientes que lo necesiten. De forma paralela, Santander está trabajando para digitalizar muchos procesos operativos en las sucursales, que multiplicará la reducción de residuos, al tiempo que agilizará la contratación y gestión de productos y mejorará los tiempos y servicio de atención al cliente.
Esta iniciativa se suma a la reducción del consumo de papel en la correspondencia enviada a los clientes, facilitándoles la posibilidad de recibir sus comunicaciones de manera digital a través de aplicación web o móvil.
En estos momentos, 8 millones de clientes de Santander en España, prefieren recibir su correspondencia y avisos de forma digital y la evolución en la reducción del uso de papel sigue avanzando. Sólo en 2023, la entidad emitió en nuestro país un 6% menos de cartas que el año anterior, lo que equivale a dos millones de sobres.
Banco Santander es neutro en huella de carbono en España desde el año 2020 en su propia actividad, con una tendencia creciente en la reducción de sus impactos medioambientales y la compensación de aquellas emisiones que no puede reducir. A día de hoy, el 100% de la energía eléctrica que utiliza procede de fuentes renovables, ha suprimido los plásticos de un solo uso, posee la certificación ‘Residuo Cero’ de AENOR, y en 2023 redujo en 493 toneladas su consumo de papel – un 27,5% respecto al año anterior y más de un 76% respecto a 2011, año en el que Santander comenzó a implantar planes e iniciativas de medición y reducción de huella propia apostando por la eficiencia energética y la sostenibilidad-.