La iniciativa procedía del Parlament de Cataluña, donde había sido impulsada por ERC, pero se ha topado con el rechazo de PSOE y PP. Los socialistas han votado en contra pese a las advertencias de sus socios habituales, incluido Sumar, que ha avisado a su compañero de coalición de que «no puede seguir jugando a dos bandos». Para los partidos a la izquierda del PSOE se trataba de una oportunidad de garantizar el retorno social del rescate bancario. Los socialistas ven la iniciativa «desactualizada» y defienden que el Gobierno ya tiene un plan para los pisos de la Sareb. La proposición de ley cuya toma en consideración ha sido debatida este martes en el Congreso planteaba obligar a la Sareb a que ceda a las comunidades y ayuntamientos el grueso de sus inmuebles —al menos el 80% de las viviendas y el 50% de los terrenos urbanizables—, adquiridos de los bancos rescatados durante la crisis financiera de 2008.