Una solidez, afirma la agencia de raiting Scope en su último análisis sobre España, de la que el país seguirá haciendo gala en los próximos años, a tenor de las previsiones ofrecidas por los principales organismos, que lo sitúan liderando el crecimiento de las principales economías avanzadas. «La fuerza económica de España se sustenta en un sector servicios amplio y bien diversificado», explican los analistas de Scope Ratings. De hecho, destacan que la actividad económica superó a la de la UE en 2024, avanzando un 3,2%, impulsada por un mayor consumo y un mejor comportamiento del turismo y de los servicios no relacionados con el turismo.
«España es la cuarta economía de la UE, con un PIB nominal y un PIB per cápita de aproximadamente 1,7 billones de dólares y 36.000 dólares, respectivamente, en diciembre de 2024. El PIB per cápita no ha dejado de aumentar y se ha acercado al de sus homólogos de la UE en los últimos años». En este sentido, desde Scope dicen que el país ha disfrutado de una «notable» estabilidad económica y financiera en los últimos años y ha aplicado activamente reformas para modernizar su marco institucional, desencadenando una dinámica recuperación tras la pandemia de Covid-19.
«Aunque el crecimiento económico ha sido sólido, España tiene una productividad y una renta per cápita inferiores a las de otras economías avanzadas, lo que pone de relieve la necesidad de nuevas reformas estructurales para potenciar un crecimiento económico sostenible», advierten los expertos.
Respecto al mercado laboral, comentan que «se ha fortalecido desde que se promulgaron las reformas en 2021», que redujeron la proporción de empleo temporal y acercaron la tasa de desempleo a la media de la UE.
«La calificación de España por parte de Scope es actualmente ‘A’ con perspectiva estable. El rating está respaldado por una economía más resistente, diversificada y sostenible y una consolidación fiscal sostenida». Con todo, en Scope subrayan que las debilidades crediticias se derivan de los elevados y crecientes niveles de deuda pública, que conllevan una menor capacidad de respuesta ante una crisis financiera y una mayor dependencia de la buena voluntad de los inversores; un desempleo estructuralmente elevado y una normativa laboral nacional restrictiva; unos niveles de productividad débiles; y la continua polarización y fragmentación del panorama político nacional.
En cuanto al sector bancario español, los estrategas recuerdan que el forma parte de la Unión Bancaria Europea y añaden que está liderado por dos entidades diversificadas a escala mundial, Santander y BBVA, y un gran banco nacional de carácter general, CaixaBank. Les siguen varios bancos de segundo nivel (como Banco de Sabadell, Bankinter y Unicaja), junto con algunos operadores regionales como Kutxabank e Ibercaja.
«Los cinco primeros bancos representaban cerca del 70% de los activos nacionales del sector en 2023, lo que indica una elevada concentración bancaria», afirman. «El sector se caracteriza por una fuerte eficiencia de costes, que ha mejorado significativamente en los últimos años tras el último ciclo de consolidación en 2020-2021. Las métricas de rentabilidad también han mejorado, en línea con otras economías europeas (Alemania, Italia, Bélgica, Francia), lo que ha permitido a los bancos reforzar sus perfiles financieros tras años de resultados débiles».
Asimismo, indican que la calidad de los activos es estable, aunque esperan que se normalice a partir de los bajos niveles actuales, ya que el crecimiento de los préstamos al consumo y al por menor no garantizados presenta más riesgos que los préstamos garantizados o las hipotecas. «Por otro lado, el aumento de los niveles de empleo sigue favoreciendo la calidad de los activos».
En este escenario, las sucursales siguen siendo el principal canal de distribución, pero la mayoría de los grupos bancarios han reducido significativamente su red física como parte de sus planes de reestructuración. Paralelamente, los bancos españoles están desarrollando plataformas digitales para la distribución de productos y la divulgación, en línea con sus homólogos internacionales.