Matos, directora de Estudios y Portavoz de Fotocasa, ha destacado que el precio de los alquileres «ha tocado techo en tres ocasiones en 2022 y sigue haciéndolo cada mes del 2023» a causa del gran desequilibrio entre oferta y demanda, lo que podría «confirmar la percepción ciudadana de que los precios están lejos de estabilizarse y seguirán la tendencia alcista».
Al analizar los años precedentes, cabe recordar que justo antes de que estallase la crisis sanitaria de la covid-19, eran el 59% los particulares que consideraba que el precio de la vivienda de compra iba a continuar una tendencia creciente. Con respecto al alquiler, eran un 71% los que creían que los precios progresarían al alza.
La percepción se relajó con la pandemia hasta alcanzar un 48% de personas que esperaba una tendencia creciente de los precios de compra en 2021, así como un 58% esperaba que aumentaran los alquileres. Sin embargo, en la actualidad ya se han recuperado los niveles de percepción previos a la covid-19 debido a la inflación, la subida de tipos y la incertidumbre provocada por la guerra en Ucrania. En cuanto a las diferentes percepciones según segmentos de edad, varían notablemente entre el alquiler y la compra. Los ciudadanos entre los 45 y los 54 años prevén de forma más marcada un aumento en el precio de compra, con un 75% de los que forman este grupo de edad que creen que continuará la tendencia alcista.
Por su parte, los jóvenes entre 18 y 24 años son la franja donde más se acentúa la creencia de que los alquileres van a seguir incrementándose. De este modo, el 83% de las personas que se encuentran en este grupo opinan que el coste del arrendamiento crecerá. Además, todos los segmentos de mayores de 25 años registran en torno a un 80% de coincidencia en que los alquileres van a seguir subiendo, alrededor de 10 puntos porcentuales más que en febrero de 2022.
En cuanto a las diferencias en términos territoriales, Andalucía y Cataluña son las comunidades donde los particulares tienen una expectativa de subidas de precio más acusadas para el mercado de la vivienda en propiedad. Así, en la primera son el 75% de particulares los que creen que seguirá encareciéndose, frente al 68% que opinaban lo mismo en febrero de 2022. En Cataluña, por su parte, los que prevén el precio de compra de vivienda seguirá incrementándose son el 73%, cuando en febrero de hace un año estaban en el 70%.
En cambio, en otras autonomías como Madrid y la Comunidad Valenciana se percibe una estabilización con respecto a las olas de 2022. Así, los madrileños que pronostican que los precios de compra seguirán al alza eran, en febrero de 2023, el 69%, mientras que un semestre antes suponían el 73%. Por otro lado, en la Comunidad Valenciana apuestan por un continuado crecimiento de los precios de compra en un 70% de los casos, un punto porcentual menos que en agosto, pero seis más que en febrero de 2022.
En cuanto al alquiler, las previsiones de subidas de precios son comunes a todos los territorios. El porcentaje más elevado de los que creen que los precios de los arrendamientos seguirán incrementándose volvemos a encontrarlo en Andalucía, con un 83%, 16 puntos porcentuales más que el 67% registrado doce meses antes. Le siguen los catalanes, con un 82%, que en febrero de 2022 era un 69%, los residentes en la Comunidad Valenciana, con un 81%, frente al 69 % de doce meses antes, y los madrileños, que pasan al 77%, frente al 68% de febrero de 2022.