El grupo automovilístico Toyota ha vuelto a quedarse con el trono mundial de las ventas de coches por tercer año consecutivo. Según los datos publicados este lunes por el fabricante nipón, la compañía cerró 2022 con 10,48 millones de matriculaciones, lo que supone casi igualar sus números del ejercicio precedente (apenas retrocedió un 0,1%).
De esta forma, el grupo repite un primer puesto que ya consiguió en 2021 y 2020, cuando arrebató ese puesto a Volkswagen.
Sus principales competidores han quedado muy lejos de poder disputarle el liderato de las ventas en 2022. El segundo puesto ha sido para el mencionado grupo VW, que entregó 8,26 millones de unidades, tras disminuir un 7% sus entregas por la persistencia de la crisis de chips. Esto ha supuesto un cuello de botella en las fábricas de coches que las asiáticas han sorteado mejor que las automovilísticas europeas.
En ese sentido, el grupo Stellantis, a la espera de que dé los datos de ventas de todo el año, redujo sus entregas un 7,4% en el primer semestre de 2022, con 3,03 millones de coches vendidos. Se espera que los datos de matriculaciones definitivos se queden lejos de los números de Toyota, ya que el grupo liderado por Carlos Tavares había vendido en 2021 unos 6,58 millones de automóviles. Esta cifra quedó en ese entonces ligeramente por encima de General Motors (otro que aún no ha dado sus resultados de ventas de 2022), que había entregado 6,29 millones de unidades en 2021.
Por su parte, la surcoreana Hyundai consiguió lidiar mejor con la crisis de chips y el aumento generalizado de precios, con un incremento del 1,4% de sus ventas en todo el mundo en 2022, quedándose a las puertas de superar las cuatro millones de unidades (vendió 3,94 millones de coches). Sumadas a las ventas de Kia, con 2,9 millones de vehículos, el grupo surcoreano ha entregado 6,84 millones de unidades en todo el mundo en 2022, un 2,6% más.
El grupo Renault quedó lejos de todo este grupo de fabricantes, ya que sufrió especialmente el impacto de la guerra en Ucrania. El inicio del conflicto bélico le obligó a abandonar sus operaciones en Rusia, que era su segundo mercado más importante tras Francia, lo que afectó a su cuenta de resultados y matriculaciones. Por ello, la compañía disminuyó sus ventas un 23,8% en 2022, hasta las 2,05 millones de unidades.