El conseguidor de la trama, que decidió tirar de la manta tras su detención por el fraude de los hidrocarburos, consigue respaldo del instructor, que ha pasado de valorar estas confidencias como un mero testimonio a como indicios del caso.
En concreto, el magistrado de la Sala Penal sostiene que las revelaciones del empresario cuentan con una «razonable corroboración indiciaria» que hacen necesario, según dice, una investigación patrimonial de los años anteriores a que Ábalos conociera a Koldo y a Aldama. De esta forma, desestima el recurso del exministro de Transportes, al que se adhirió quien fuera su mano derecha, Koldo García, y reitera que la UCO indagará su patrimonio desde el 1 de enero de 2014.
«Solo así podrá conocerse si han existido, con ocasión de esas nuevas relaciones, cambios significativos en las conductas o gestiones económicas del Sr. Ábalos Meco, en relación con la mayor o menor disposición significativa de fondos bancarios para atender a sus gastos, que, prima facie, (…) procedentes mediatamente de su asesor e inmediatamente del Sr. de Aldama, tal y como éste sostiene con una razonable corroboración indiciaria que resulta de los extremos ya consignados», indica el instructor.
Puente descarta que se esté ante una investigación prospectiva y alega que si se amplía el foco de la investigación es porque la misma les lleva por esos cauces .Según precisa, el procedimiento abierto en el alto tribunal por el presunto «papel principal» de Ábalos en estos hechos no se apoya únicamente en el relato de Aldama. Al contrario, considera que constituyen indicios lo defendido también por Alberto Escolano (persona de la máxima confianza de Aldama) que confirmó en su declaración como testigo el 4 de marzo, que abonó la práctica totalidad del alquiler mensual del piso en el que residía la entonces pareja del exministro, Jessica Rodríguez.
«Esos pagos, como resulta de lo actuado, dieron comienzo en el mes de marzo del año 2019 y se prolongaron hasta septiembre de 2021, es decir, comenzaron mucho antes, no ya de que se concertaran los tan referidos contratos para la adquisición de mascarillas, sino incluso con anterioridad también a que se detectara en España la primera infección por Covid-19», explica el juez. De esta forma desestima la pretensión del exsecretario de organización del PSOE de que esta causa se ciña exclusivamente a la adjudicación de los contratos de pandemia desde el Ministerio que dirigía.
A los testimonios de Aldama y de Escolano añade también el de la propia Jessica, que confirmó que le pagaron el alquiler de la vivienda de lujo en Plaza de España e igualmente, el de Carmen Pano, la empresa que confesó haber llevado 90.000 euros a la sede del PSOE en Ferraz por orden de Aldama. Se trata de preceptos que expuso en el auto por el cual acordó ampliar su investigación patrimonial al año 2014 y a los que ahora recurre. «Pco más se puede hacer aquí que reproducir los razonamientos que respecto a la existencia de indicios bastantes para justificar las diligencias acordadas», indica.
Con todo, el magistrado del caso Koldo reconoce el error cometido por la Policía Judicial por cuanto que le atribuyó la propiedad de una vivienda en Colombia valorada en 2,5 millones de dólares (2,1 millones de euros), cuando en realidad no superaba los 750 euros. El motivo, que llevó a corregir dicho informe, fue que confundieron la moneda del dólar con el peso colombiano, siendo esta última la real y la empleada para pagar el terreno . «Contiene, es verdad, un error. Actuando los agentes bajo mis órdenes y en el estricto cumplimiento de aquéllas, me corresponde asumirlo en mi condición de responsable máximo de la investigación emprendida (…) Pero destaco igualmente que es un error que carece, afortunadamente, de consecuencia alguna en esta causa», indica, a la par que recuerda que no necesariamente se deba presuponer un origen delictivo a estos bienes.
Ahora bien, recuerda que se debe investigar presuntas irregularidades a tenor de lo confesado por Aldama en sede judicial. Este conseguidor, que se anotó un beneficio de 5,5 millones de euros con el pelotazo de las mascarillas, dijo que se repartieron comisiones con estos contratos y con otras actuaciones que tuvieron lugar antes de la pandemia. En concreto, aseguró que se adjudicaron obras millonarias a empresas cercanas a la trama a cambio de un pago que rondaba el 1-1,5% de la obra. Estas comisiones, dijo, se las repartieron entre ellos y también fueron a parar al PSOE. Según calculó, se trataría de alrededor de unos 4 millones de euros en dinero en ‘b’.