La mayor contribución a la tasa de inflación anual de la zona euro provino de los servicios (+1,74 puntos porcentuales), seguidos de alimentos, alcohol y tabaco (+1,21), bienes industriales no energéticos (+0,66) y energía (-0,68 puntos porcentuales).
De esta manera, la inflación de la energía bajó hasta el 6,7%, los alimentos no procesados se encarecieron un 6,8%, los servicios mantuvieron su subida del 4% y el coste de los bienes industriales no energéticos avanzó un 2,5%.
En toda la Unión Europea (UE), la inflación anual fue del 3,4% en diciembre, frente al 3,1% en noviembre. Por países, en comparación con noviembre, la inflación anual disminuyó en quince Estados miembros, se mantuvo estable en uno y aumentó en once. Las tasas anuales más bajas se registraron en Dinamarca (0,4%), Italia y Bélgica (ambos 0,5%). Por el contrario, las tasas anuales más altas se registraron en Chequia (7,6%), Rumanía (7%) y Eslovaquia (6,6%).
Centrando la atención en las grandes economías de la eurozona, en España, la tasa de inflación se mantuvo estable en el 3,3%, en Alemania subió desde el 2,3% al 3,8% y en Francia aumentó desde el 3,9% al 4,1%.