La manifestación ha arrancado en la plaza Urquinaona y ha bajado por la Via Laietana, desde donde se ha desviado a la plaza de Sant Jaume, en la que se encuentran el Palau de la Generalitat y el Ayuntamiento de la ciudad, donde ha finalizado. A su paso por la Jefatura Superior de la Policía, los manifestantes han lanzado pequeñas urnas y papeletas a semejanza de las utilizadas en las votaciones de 2017.
En la plaza de Sant Jaume se ha podido ver una pancarta de gran tamaño con una fotografía de esa jornada de hace seis años y diversas banderas catalanas e independentistas. Antes del inicio de la manifestación, la presidenta de la ANC, Dolors Feliu, ha advertido a Junts y a ERC sobre «una amnistía trampa que solo sirva para blanquear al Estado español» y ha añadido: «no queremos que nos perdonen ni tenemos demasiadas ganas de perdonar hasta que hayamos ejercido la autodeterminación».
En paralelo, ha tenido lugar en la antigua cárcel Modelo un acto de presentación de la campaña de apoyo a los procesados en la llamada «Operación Judas» -a quienes se acusa de planificar sabotajes con explosivos en edificios e infraestructuras del Estado.
En el acto han participado las Plataformas Antirrepresivas de Barcelona y Ponent, CDR Catalunya, la sectorial de Personas Represaliadas de la ANC, Desobediencia Civil Catalunya y otras entidades. En ese evento han participado unas 300 personas, según la policía local barcelonesa. Los mismos colectivos protagonizarán esta tarde una marcha desde la Modelo hasta el cuartel de la Guardia Civil en Travessra de Gràcia.