De momento, por ejemplo, salvo algunas propuestas deslavazadas de la vicepresidente y ministra de Trabajo sobre la reducción de la jornada laboral, y las subvenciones para difuntos colectivos, básicamente jóvenes, es decir propuestas muy concretas que se traducen en mayor gasto del Estado, poco se sabe de los planes económicos de los partidos que se presentan a la elección.
El popular Feijoo es el junco que ha desgranado una batería de medidas y algunas propuestas concretas al respecto pero que se enmarcan, se supone, dentro de un plan mas amplio que esta por conocer. Puede que, en su momento, cuando considere que los españoles nos lo merecemos Sánchez dé a conocer su plan para estos próximos cuatro años.
Sin embargo, el resto de las formaciones, en realidad no van a elaborar ningún plan, entre otras cosas porque no lo necesitan. Todos ellos son conscientes de que nunca van a gobernar. Es mas puede incluso que se diluyan como un azucarillo en el café en el momento que formen parte de la oposición. Nuestra reciente historia `política tiene abundantes casos de esta evolución y de las continuas desapariciones de partidos secundarios que terminan siendo arenilla y poco mas.
Así que, ¿para que se van a esmerar en presentar un plan, lo cual requiere, primero saber y luego dedicarle horas?
Por lo tanto, seguiremos con una campaña cutre en la que no se discute nada y simplemente se insulta y descalifica y eso si se hace ante las cámaras de las televisiones que son las únicas que están en campaña.