El verde sigue predominando en las paredes, de las que cuelgan, junto al gran espejo que refleja la bodega, unas artesanales cabezas de ovino en mimbre y lana, un guiño a la importancia que tiene y va a tener el cordero Segureño (IGP) en esta casa de aires granadinos con un poco de levante, un punto viajero, el cariño de la abuela y mucha mano del chef autodidacta José Miguel Valdivieso. Sí, es difícil de describir, no se puede encasillar, pero enamora a todo aquel que se sienta en su salón, que, por cierto, también estrena unas cómodas y elegantes sillas, perfectas para la sobremesa.
La carta ha cambiado casi tanto como el espacio, pero la esencia es la misma y los colores, aromas y sabores siguen estando más que presentes en cada uno de los platos. Entre las novedades pensadas para compartir destacan la crujiente Tortillita de camarón, los Pimientos asados con boquerones y la reversionada berenjena, que ahora se hace ‘a la chinocordobesa’. Junto a ellos, los adictivos Torreznos con mayonesa de kimchie, su ensaladilla rusa o las variadas croquetas. Entre los platos más contundentes se cuela una receta 100% de temporada y original, Coliflor en texturas con huevo frito y trufa; y sus demandados Canelones se sirven ahora rellenos de carrillera al curry rojo y bechamel de coco.
Del mar, además de sus Fingers de bacalao, que gustan a toda la familia, José Miguel sorprende con unos Callos marineros, primer plato de ‘casquería’ que irrumpe en Uskar. Y de la tierra… el cordero, pero no uno cualquiera, ya que trabajan desde su apertura con el auténtico Segureño (IGP) de su Huéscar natal. Desde esos días sirven la paletilla asada al aroma de la Sagra, perfecta para dos personas, y ojo, que también está disponible para llevar. De modo informal puede disfrutarse como relleno de un brioche; y en modo gourmet y para conquistar: Cuello de cordero envuelto en hoja santa al PX.
En Uskar disfrutan tanto paladares atrevidos como clásicos, y por eso nunca fallan sus arroces con ese guiño a la terreta de Rita. Siempre está en carta la Paella del senyoret, a la que se suma un arroz de sugerencia elaborado con ingredientes de temporada. Al igual que se ha convertido en inamovible la chuleta de Atún rojo del Estrecho; los postres siempre esconden alguna sorpresa y el salado-dulce se entremezcla en todos ellos.
Para completar la experiencia hay que preguntarle a Raúl García, sumiller responsable de la bodega del restaurante -con más de 170 tipos de uva-, por el maridaje perfecto.
La oferta de Uskar es variada y creativa. Otra forma de descubrirla más a fondo es a través de su Menú Degustación, sorpresa y para dejarse en manos del chef. Incluye tres entrantes, con las verduras de HarBest como ingrediente principal -cocinadas muchas de ellas en kamado-, para continuar con un plato de pescado; otro de carne; y un postre. Su precio es de 40 €.
Uskar
Alonso del Barco, 11.
Madrid. Tel. 91 139 68 63.
https://restauranteuskar.com
Tras el cambio, Uskar (https://restauranteuskar.com) tiene capacidad para 35 personas en sala y otras 29 en terraza. Abre de miércoles a sábado de 13:00 a 24:00 h; domingos de 12:30 a 16:00 horas y la cocina en horario de comida funciona de 13:30 a 16:00 y por las noches de 20:00 a 22:30 h. El precio medio de la carta es de 45 €. Además, prácticamente todos sus platos se pueden encargar para recoger en el local. Periódicamente hacen catas y cenas maridaje de lo más interesantes que anuncian en sus redes.