La citada subastará será el próximo jueves día 1, y en ella, el Tesoro ofrecerá a los inversores bonos a tres años, obligaciones a siete años, otras obligaciones a treinta años, y otras indexadas a la inflación a quince años. Tras esa puja, y según el calendario oficial del Tesoro, España celebrará una nueva subasta el día 6 de junio, de letras a seis y doce meses, mientras que el 13, ofrecerá letras a tres y nueve meses. Ya el día 15 de junio volverá a colocar bonos y obligaciones del Estado. La última vez que el Tesoro apeló al mercado fue el pasado 18 de mayo, y en esa ocasión, colocó 6.509 millones de euros en cuatro denominaciones distintas de bonos y obligaciones, entre ellas, unas obligaciones a veinte años, cuyo interés marginal superó el 4%.
Las familias encuentran rentabilidad en las letras del Tesoro, los bonos y las obligaciones del Estado, elevando en algo más de 9.000 millones de euros su inversión en letras durante el primer trimestre del año, llegando a alcanzar los 10.847 millones de euros, rompiendo la barrera de los 10.000 millones. De hecho, según los datos actualizados por el Banco de España, a cierre de 2022, las familias españolas acumulaban 1.826 millones de euros en papel del Estado, lo que supone un importante crecimiento respecto al año anterior. Se ha incrementado de forma exponencial, ya que en enero alcanzó los 3.695 millones y en febrero, los 7.713 millones.
En el primer trimestre de este año y a cierre de marzo, la posesión de letras del Tesoro alcanzó esos 10.847 millones de euros, lo que supone 9.021 millones más que en el cierre de 2022. Además, esta tendencia de letras en manos de los hogares españoles, en marzo del año pasado se registraban solo 15 millones de euros.