Algo parecido debió de pensar Sánchez antes de contestar a las insistentes preguntas sobre posibles dimisiones o ceses de ministros como consecuencia del desastre de gestión. desde el principio al fin, de la llamada ley del si es si que terminara por poner en la calle o rebajar penas a varios miles de violadores y ,si no al tiempo.
Pero la contestación a esas preguntas se hizo desde Bruselas, en una comparecencia que terminó a las tres de la madrugada tras un larguísimo Consejo Europeo, por lo que Sánchez no tubo mas remedio que salir al paso, sin muchas explicaciones pero señalando que “nada de ruptura, la coalición no se va a romper, eso no se contempla. El Gobierno de coalición progresista continúa. Hoy mismo hemos aprobado una ley importante que nos sitúa a la vanguardia europea de protección de todos los animales”,-
Pero lo que Sánchez, n o podía ocultar era su preocupación por las consecuencias políticas y sociales de este fiasco, aunque ha querido evitar el choque con Podemos y ha rebajado la tensión. respaldado expresamente a Irene Montero a pesar de que en el sector socialista del Gobierno es evidente el malestar con la ministra, que está atacando con dureza a la otra parte de la coalición, a la que acusa de que querer “volver al Código Penal de La Manada” con la reforma promovida por la ministra de Justicia, y que Montero rechaza de plano porque incorpora la violencia o intimidación como elemento que justifica unas penas mayores.
“Todas las ministras de mi Gobierno cuentan con mi confianza, también la de Igualdad”, ha señalado Sánchez, que con esta frase descartaba tanto la destitución de Montero como la caída de la propia Llop,.
En un tono de gran preocupación, Sánchez ha insistido en varias ocasiones en lanzar un mensaje a las víctimas, que son las que más sufren estas rebajas de penas. “Pido no olvidar a las víctimas. Nadie deseó esta situación. Tenemos que preservar una ley que supone un avance muy importante. Tenemos que revisar la cuestión técnica que ha provocado la rebaja de penas inesperada. La propuesta que parte del Ministerio de Justicia y ahora ha registrado el Grupo Socialista da respuesta a las dos cuestiones. Preserva el consentimiento y da una solución técnica al problema”.
Y en este mismo tono, la aliada de Sánchez, la señora Diaz no se cansa de hacer llamamientos a la calma y a la tranquilidad para remansar las aguas de Gobierno y desde los pasillos del Congreso reiteraba la importancia de «cuidar la coalición» y daba carta de naturaleza a los intentos por buscar una salida que satisfaga a todos. «Entiendo el interés, pero pido que no hagamos en abierto las negociaciones. Las formas muchas veces son muy importantes. No necesitamos contar todo lo que hacemos», dijo a los periodistas que la rodeaban al tiempo que insistía en la «discreción».
En fin que entre ambos no terminan de echar paladas para tapar el desastre y que el desaguisado no termine de estropear sus deseos de seguir en La Moncloa como, de alguna manera dejan entrever las encuestas de intención de voto y animan a una crisis de gobierno para este mismo fin de semana con cambios de ministros de cara a las elecciones municipales.