En total se han recibido 13 ofertas entre el 5 y el 30 de junio, periodo durante el que se ha desarrollado esta parte última del proceso. Los servicios logísticos ofrecidos para esta infraestructura son las operaciones de descarga, almacenamiento y carga de GNL. Dentro del régimen de acceso regulado, la planta de El Musel contempla una mínima regasificación para la correcta gestión de la terminal, así como el servicio de carga de cisternas.
La puesta en marcha de El Musel supone un hito para el inicio de las operaciones comerciales de la infraestructura, que forma parte del Plan Más Seguridad Energética del Gobierno, y permitirá reforzar la seguridad de suministro energético en Europa.
La terminal ya recibió hace unas semanas su primer barco, el Cool Racer –de 174.000 m de capacidad–, que realizó una primera descarga, paso previo necesario desde el punto de vista técnico antes de la puesta en marcha comercial de la terminal, que comenzará el próximo 31 de julio.
La planta de Gijón podrá aportar hasta 8 bcm (billion cubic meters) de capacidad al año de GNL a la seguridad de suministro energético europeo. Permitirá el atraque de buques de entre 50.000 y 266.000 m³, cuenta con dos tanques de 150.000 m³ de capacidad de almacenamiento de GNL, dos cargaderos de cisternas con capacidad para cargar un máximo de 9GWh/d y una capacidad de emisión máxima de 800.000 Nm³/h.
El pasado 28 de febrero, Enagás y Reganosa firmaron un acuerdo para adquirir por parte de Enagás la red de 130 km de gasoductos de Reganosa y ésta el 25% de la Planta de El Musel. Esta operación permitirá aprovechar sus sinergias y trabajar conjuntamente en los servicios ofrecidos por la planta y en nuevas posibilidades de colaboración para reforzar la seguridad de suministro y avanzar en los objetivos de descarbonización de España y Europa.