En concreto, la energética se ha hecho con los cinco lotes que había puesto en juego la Comunidad de Madrid para los puntos de suministro alimentados en alta y baja tensión del Metro de Madrid para el período 2024-2028. A pesar de que habían mostrado interés en la licitación, junto a Iberdrola, las eléctricas Endesa, Total y Audax, finalmente la única que presentó oferta para el contrato fue el grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán.
En este nuevo contrato para cinco años, Iberdrola se ha hecho así con los suministros de tarifa 6.2TD de 794.807.667 kilovatios hora (kWh) para todo el periodo licitado, por importe de 84,046 millones de euros; así como los de tarifa 6.1TD por agrupación geográfica de 869.986.300 kWh, por 93,581 millones de euros, según la documentación publicada en el portal de contratación pública.
También se adjudicó el lote 3 en juego por 69,636 millones de euros, para los suministros de tarifa 6.1TD por agrupación geográfica de 639.822.832 kWh; el lote 4, por 75,323 millones de euros, para la tarifa 6.1TD por agrupación geográfica de 696.567.033 kWh; y un lote 5 por 3,820 millones de euros, para el suministro en baja tensión, tarifas 2.0TD y 3.0TD de 31.721.252 kWh para todo el periodo licitado, en todos los casos.
La electricidad en alta tensión, que es la que se utiliza para transportar la corriente a grandes distancias, es la de mayor consumo de la red, llegando al 97,5% del total y, además de alimentar a todas las instalaciones de las estaciones, también se transforma para su uso en los trenes. En el caso de la energía de baja tensión, la que se genera para consumo propio, la empresa pública la utiliza para alimentaciones secundarias y algunas oficinas.
Sumando ambos tipos, gracias a la adopción de medidas para aumentar la eficiencia energética, en los próximos años se prevé una reducción del consumo anual de en torno a 1,1 millones de kilovatios/hora, según datos de Metro de Madrid.