Así, la facturación sectorial registró un aumento cercano al 19% en ese ejercicio, lo que supuso rebasar ampliamente el nivel prepandemia, moderando su crecimiento en 2022, año en el que alcanzó los 1.950 millones de euros, un 2,6% más.
El desarrollo de conciertos con compañías de seguros presenta un papel primordial en el desarrollo de la actividad del sector, constituyendo el principal grupo de clientes de los centros médicos ambulatorios. Así, las aseguradoras y mutualidades concentran alrededor del 73% de la facturación agregada de este tipo de centros, repartiéndose el 27% restante entre clientes privados puros y conciertos con instituciones sanitarias públicas.
En el sector operan unos 1.750 centros médicos ambulatorios, incluyendo en esta cifra centros multiespecialidad y centros especializados, excepto clínicas dentales, oftalmológicas, capilares, de cirugía estética, de diagnóstico por imagen y de reproducción asistida.
Las grandes compañías aseguradoras y los principales grupos hospitalarios tienden a aumentar su penetración en el sector, ampliando su red de centros médicos tanto a través de la adquisición de centros ya existentes como mediante la inauguración de otros nuevos. No obstante, el sector todavía registra una alta atomización, de manera que los cinco primeros operadores reunieron en 2022 menos del 13% del valor total del mercado y los diez primeros cerca del 22%.
En un contexto de pérdida de vigor del crecimiento económico, las previsiones de evolución del volumen de negocio generado por los centros médicos ambulatorios privados apuntan a una estabilización del ritmo de crecimiento, estimándose al cierre de 2023 una variación de entre el 3 y el 4%, lo que supondría alcanzar alrededor de los 2.020 millones de euros.