La operación está sujeta a la aprobación regulatoria y debe servir para reducir la deuda de la española. La cotizada usará los ingresos obtenidos para desapalancarse. También reitera su «compromiso incondicional de alcanzar el grado de inversión con S&P a finales de 2024 como tarde, así como a mantener el grado de inversión con Fitch». Cellnex considera que con esta operación y «otras opciones estratégicas que puedan ser analizadas» avanzará en su objetivo de «cristalizar valor y acelerar el referido plan de desapalancamiento». La compañía española opera en Irlanda desde 2019, cuando compró el operador de torres y emplazamientos Cignal, presencia que amplió posteriormente en 2020, fruto del acuerdo con CK Hutchison para adquirir su portafolio de infraestructuras en seis países europeos, entre los que figuraba Irlanda.
El cierre de la operación se encuentra sujeto a las perceptivas aprobaciones regulatorias, como han recordado desde Cellnex. Según ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV),
Nomura ha actuado como asesor financiero exclusivo para esta operación y Arthur Cox como asesor jurídico de PTI. A su vez, Barclays y Santander han sido asesores financieros y Matheson, asesor jurídico de Cellnex.