Las modificaciones pactadas por los socialistas con los dos grupos catalanes se plasmaron en cuatro enmiendas transaccionales, tres al articulado de la norma y una al preámbulo, que recibieron el apoyo mayoritario de los diputados. En concreto, las cuatro enmiendas recibieron 20 votos a favor y 17 en contra. Las respaldaron PSOE, ERC, Junts, PNV, Sumar y Podemos, mientras que posicionaron en contra PP y Vox.
El nuevo dictamen contempla amnistiar a todos los encausados por el procés y solo excluye a los acusados de terrorismo, traición o malversación de acuerdo con lo que establezca la normativa europea. Además, se amplía el ámbito temporal de la medida de gracia dos meses, de forma que empezará el 1 de noviembre de 2011 en lugar del 1 de enero de 2012, según se refleja en la enmienda al preámbulo de la ley.
El debate y la votación del nuevo texto se inició con retraso, al pedir el PP que se les diera tiempo para estudiar las enmiendas pactadas por el PSOE y los otros partidos. La Mesa de la Comisión de Justicia rechazó este planteamiento de los populares tras imponerse el planteamiento de los socialistas y sus socios.
Está previsto que la nueva redacción de la ley de amnistía sea llevada a un Pleno del Congreso de la semana que viene, que se celebraría tras el Pleno ordinario. Si la ley es respaldada por una mayoría absoluta de los diputados, pasaría al Senado para su discusión en esta sede parlamentaria.