Analizando los principales componentes, los servicios tuvieron la tasa anual más alta en junio, al subir su precio un 4,1%, estable en comparación con mayo.
Por detrás se colocan los alimentos, alcohol y tabaco (2,5%, en comparación con el 2,6% en mayo), bienes industriales no energéticos (0,7%, estable en comparación con mayo) y energía (0,2%, en comparación con el 0,3% en mayo). Descontando el impacto de la energía y de los alimentos, así como del tabaco y del alcohol, la tasa subyacente se mantuvo en el 2,9%.
Por países, Bélgica (5,5%) registró el mayor incremento de los precios. Por delante de España (3,5%) y Croacia y Países Bajos (3,4% ambos). En el lado contrario se sitúan Finlandia (0,6%), Italia (0,9%) y Lituania (1%), con las menores subidas de los precios en junio.