Este es uno de los grandes retos que tienen el sector, la Comisión Europea y los gobiernos de los países. Pero si lo asumen como reto propio, eso nos dará un incentivo adicional para dar un paso adelante para que se cumplan los hitos en el momento en que son necesarios», ha reclamado. «Todos los aquí presentes tenemos proyectos ralentizados, en barbecho, a los que no nos atrevemos a dedicar muchos recursos porque no sabemos el tiempo que pasará desde su diseño hasta su ejecución real. Y aprovecho la oportunidad que me da esta tribuna para que, en la medida de lo posible, hagamos que esa regulación y esos poderes públicos ayuden al sector a poder ejecutar todas las ideas que tenemos», ha reivindicado el presidente de Naturgy.
Reynés también ha hecho referencia al «trilema» de buscar una solución equilibrada entre seguir la senda de la descarbonización y, a la vez, encontrar soluciones tanto para la asequibilidad de los precios como a la seguridad del suministro». Ese sería el otro gran desafío del sector, «que me gustaría trasladar a la nueva Comisión Europea. Porque, aunque en Europa no tengamos una política energética única, porque somo cautivos de mapas energéticos diversos en cada país, sí se va avanzando en unos objetivos generales», ha añadido.
Reynés ha aludido a la nueva etapa que se abre a nivel europeo: «El inicio del curso escolar, que coincide con estas jornadas, parece ser el inicio de una nueva etapa en la gestión del sector. Y este año, además, coincide con el inicio de una nueva etapa en Europa; se están constituyendo las comisarías y el entramado de gestión europeo. Fue precisamente Europa la q decidió hace ya años tomar liderazgo de lo que llamó Pacto verde, que tenía como objetivo sobre todo la descarbonización, la se fijó para 2030 reducir en un 50% las emisiones del año 90. Esto estaba muy bien, pero nadie se imaginó que en este periodo hasta 2023 íbamos a sufrir lo que hemos sufrido: la influencia tan importante de la geopolítica en el mundo, y en especial en la energía», ha señalado. «Y estos movimientos geopolíticos, centrados inicialmente en Ucrania y Rusia, después se han ido extendiendo e incorporando volatilidad y otros muchos efectos. Un ejemplo reciente puede ser la guerra de Israel, que creo que ha puesto de valor 2 aspecto adicionales a la importancia de la descarbonización: la seguridad de suministro y la asequibilidad de los precios de la energía».
En 2024, ha recordado se han aprobado dos importantes medidas a nivel europeo: la reforma de mercado eléctrico y el paquete sobre el mercado del gas. «Esto es muy relevante ir avanzando, pero quedan muchas cosas por hacer. Y una de ellas tiene que ver con los Planes Nacionales Integrados de Energía y Clima, que deben fijar el marco para favorecer incentivar y asegurar la inversión allí donde tenemos que avanzar»; una de las cuestiones prioritarias es, «claramente, la de las redes de distribución, en especial las redes eléctricas». «Nosotros, más que la inteligencia artificial, utilizamos la inteligencia natural, la de nuestros equipos y colaboradores; y hay mucha inteligencia natural dedicada a proyectos que sólo necesitan ese impulso final de acortar los plazos», ha rematado el presidente de Naturgy.