La respuesta del mercado a las nuevas condiciones del Ejecutivo es clara: Sabadell cotiza con una caída del 0,11% en el día, frente a una subida del 1,49% antes de la suspensión (cotiza a 2,68 euros frente a los 2,726 previos). La reacción es más mitigada en el caso de BBVA, que cotizaba a 13,155 euros y lo hace a 13,13, cambiando una subida del 2,85% por el 2,6%.
La jornada es alcista para todos los bancos cotizados, que marcan todos subidas de más del 2% excepto Sabadell.
También ha variado la brecha entre la cotización de mercado y la oferta planteada por BBVA, consistente en una acción propia más 0,7 euros a cambio de 5,3456 títulos de Sabadell. La firma catalana cotizaba un 4,92% por encima de lo ofrecido antes de la decisión del Consejo de Ministros, y después, un 2,6%. Esta diferencia, poco habitual en este tipo de operaciones, puede responder a varios motivos: que el mercado espere una mejora de la oferta o que los inversores esperen una mejor cotización en solitario del Banco Sabadell.
La operación ha sido autorizada con nuevas condiciones:
• que ambas entidades se mantengan separadas durante, al menos, tres años,
• que no haya despidos ni cierre de oficina.
Antes de conocerse los detalles del dictamen del Ejecutivo, el regulador de los mercados —la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV)— decidió suspender la cotización del BBVA y del Sabadell en Bolsa. La autoridad bursátil señalaba en un comunicado que las acciones de los bancos se suspenden de negociación “mientras es difundida una información relevante” sobre las entidades, una posibilidad que ya apuntó el lunes el presidente del supervisor bursátil, San Basilio, quien abogó ayer por coordinarse con el Ministerio de Economía y suspender de forma “quirúrgica” la cotización. La suspensión duró dos horas, hasta la conclusión de la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
Hacia las 12.30 horas, la CNMV comunicaba la suspensión de negociación. Cerca de una hora después, el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ha comparecido en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros para dar cuenta de la decisión. Cuerpo ha dicho que el Consejo ha autorizado la operación con la condición de que durante tres años mantengan “la personalidad jurídica y el patrimonio separados”.
El Gobierno impone así un requisito más duro que los que marcó en su día la CNMC, especialmente en lo que respecta a oficinas y pymes.
Una vez que se ha hecho pública la decisión del Consejo de Ministros, el BBVA deberá informar de ello a la CNMV y ofrecer los nuevos cálculos sobre la oferta con las nuevas condiciones. Si la entidad decide seguir adelante con la opa, esta pasará a manos de la CNMV, que deberá aprobar el folleto de la operación. San Basilio avanzó el lunes que tiene el trabajo muy avanzado “a falta de algunos flecos” y que intentará “ir lo más rápido posible”. Según comentó el presidente del supervisor bursátil la autorización podría llegar en tres semanas.