Estos analistas apuntan a su vez a varios factores que frenaran el ritmo de crecimiento de la economía global como pueden ser la ralentización de la economía china o algunos riesgos geopolíticos como las posibles tensiones entre Estados Unidos y China derivadas de las próximas elecciones en Taiwán a principios de 2024.
En Europa habrá un “crecimiento muy bajo” en lo que resta de año, según destaca Enrique Feás, investigador principal del Real Instituto Elcano, quien asegura que el enfriamiento de la economía del viejo continente vendrá determinado, entre otros factores, por la evolución de la guerra en Ucrania que podría llegar a provocar una crisis alimentaria.
Por su parte, Steinberg, también investigador principal de la misma institución, avisa de que ahora “Europa se enfrenta a una mayor dependencia de la energía externa y la desconexión con Rusia”, por lo que “hay que mantener ese buen ritmo de ahorro y sustitución de fuentes alternativas”.
Bajo este clima Steinberg apunta que unos tipos de interés al 4% o 5% son un frenazo para la economía, suponiendo un aumento del coste de las hipotecas y una contracción del consumo