Por su parte, el resultado neto fue de 109 millones de euros, frente a las pérdidas de 116 millones de euros del año pasado debido al impacto de cambios en las valoraciones de inventarios y del gravamen extraordinario sobre las compañías energéticas en España.
La empresa ha informado en un comunicado de que las tres unidades de negocio de Moeve mostraron desempeños dispares durante el tercer trimestre, con un Ebitda más débil, que se situó en 383 millones de euros, un 10% menos interanual. Por su parte, ha subrayado que mientras que la reducción de los márgenes de refino provocó una caída de los beneficios en el negocio de Energía, los de Exploración y Producción y Química mejoraron sus resultados, que se mantuvieron sólidos y por encima de los resultados para el mismo periodo del año anterior. “Nos enorgullece anunciar nuestra transformación en Moeve, que demuestra nuestro compromiso firme de convertirnos en líderes en la producción de moléculas verdes en Europa en esta década. En un entorno geopolítico difícil, Moeve ha obtenido unos resultados financieros satisfactorios que permiten seguir invirtiendo en nuestra estrategia de transición. Seguiremos trabajando con las autoridades para garantizar unos marcos regulatorios y fiscales que favorezcan las inversiones necesarias para la transformación urgente de nuestro sistema energético», ha dicho el consejero delegado de la compañía, Maarten Wetselaar. El flujo de caja de las operaciones fue de 206 millones de euros (267 millones en el tercer trimestre de 2023), impactado por la tasa extra. Moeve ha contribuido con 3.259 millones de euros en impuestos en España hasta septiembre, de los cuales 1.794 millones fueron asumidos por la compañía y 1.466 millones de euros fueron recaudados por cuenta de la hacienda pública española. El importe total incluye el pago de 243 millones de euros por el impuesto extraordinario, que para la compañía, entre 2023 y 2024, se sitúa en un total de 566 millones de euros.
Por su parte, las inversiones sostenibles aumentaron un 75% respecto al mismo periodo del año anterior, hasta 116 millones de euros, impulsadas principalmente por la construcción de la planta de biocombustibles 2G con capacidad de producción de hasta 500.000 toneladas en Palos de la Frontera (Huelva). La deuda neta del tercer trimestre fue de 2.519 millones de euros, en línea con el mismo periodo de 2023, mientras que la ratio de deuda neta/EBITDA (de los últimos doce meses) descendió a 1,6x. La liquidez de la compañía de julio a septiembre se reforzó hasta alcanzar los 6.287 millones de euros, un 51% más que en el tercer trimestre de 2023, lo que, según la propia empresa, pone de manifiesto la «política financiera conservadora y prudente» de Moeve.