Todo esto viene a cuenta de la insistencia de Sánchez y sus voceros, que son muchos e incluso ocupan cargos hasta de ministro/a, con el tema del lodo, la internacional ultraderechista y todas esas memeces que se ha inventado para no dar explicaciones de las actividades fraudulentas de su señora o de su extraño comportamiento en temas como las relaciones con
Marruecos o su absurda campaña a favor de los palestinos.
Y es que cada vez que abre la boca o escribe una carta de amor a sus seguidores sale a relucir la obsesión. No hay nada mas que leer con calma la carta enviada a las huestes socialista con motivo del 145º aniversario de su fundación para comprobar que se trata de una repetición enfermiza que en este caso le hace asegurar
que «nuestra democracia» se «enfrenta al avance de una internacional ultraderechista» que «trata de imponer su agenda regresiva». «Para lograrlo, ponen en marcha una máquina del fango, alentada por la derecha y la ultraderecha, junto a páginas webs y asociaciones ultraderechistas que fabrican bulos y mentiras. Bulos que a continuación se propagan en tertulias y en las tribunas para después judicializar falsas denuncias, deteriorando gravemente nuestra democracia».
No se me niegue que se trata de una obsesión y que lo que le tiene preocupado es que la buena de doña Begoña termine por enfadarse y ponerle a fregar los cacharros de la cocina como castigo por su torpeza y su conversión en ele hazmerreir de media Europa, esa Europa en la que sueña para su jubilación, y que al rirmo que van las cosas cada vez se aleja mas.
Pero que nadie se preocupe, porque él y sus muchachos no están dispuestos a “asistir impasibles al deterioro y la degradación de la democracia». O lo que es lo mismo, ellos se van a encargar también de restaurar el desastre antidemocrático llevado a cabo en estos meses para convertir a España en la salvadora de Europa y la democracia accidental.
¡¡¡Que Dios nos coja confesados¡¡¡