En efecto, el 20% de las acciones que detenta la SEPI son las que inclinan la balanza en uno u otro sentido, De los doce miembros del Consejo de REDEIA –el holding del que depende Red Eléctrica de España- tres son designados por la SEPI. En la Junta telemática de este lunes se oficializará la designación de la exministra González Laya como nueva consejera dominical y de Castellanos como nuevo vocal.
Pero el nombre que más suena como posible relevo de Corredor es el de Fabra. La Junta le nombrará nueva vocal del Consejo de Redeia y parece que llega con todas las papeletas para sustituir a una “quemada” Corredor que aunque no ha sido defenestrada por el Gobierno por el apagón si ha tenido que contentarse con un ligero apoyo y poco más.
Corredor se ha mantenido firme en la defensa de su labor. Incluso ha cuestionado las conclusiones de la investigación del Ejecutivo sobre lo ocurrido el 28 de abril. La falta de planificación que se le reprochaba desde la investigación del Gobierno pronto la intento rebatir con un contrainforme -presentado sólo un día después- en el que REE limitaba la responsabilidad a las energéticas.
Este lunes la presidenta tendrá que escuchar bastantes criticas. El viernes, representantes de pequeños accionistas de la entidad lo dejaron claro: Corredor debe dimitir. En una comparecencia ante los medios, organismos con intereses en Redeia, como AEMEC de accionistas minoritarios, Better Finance o World Federation of Investors aseguraron que carecen del peso accionarial suficiente para forzar la salida de Corredor, pero no de razones para reclamársela. Aseguran que no haber reconocido ningún error siendo el responsable último de la red eléctrica no deja en buena situación a la sociedad. Siembra dudas e incertidumbre entre los accionistas e inversores, señalan. Tampoco ven bien lo que consideran una “falta de transparencia” en la gestión de la crisis.
Este grupo de accionistas, con relevancia suficiente para estar presente en la junta pero no para condicionar sus decisiones, recuerda que Redeia desoyó las advertencias que tiempo antes del apagón se le hicieron por problemas en la red y que éstas no se atendieron: «Los avisos que llegaban desde hacía tiempo no se tuvieron en cuenta», recuerdan, «queremos cambios, esta no es manera de gestionar una compañía estratégica como ésta. Si no cambia, irá a peor». Denuncian que lo sucedido constituye “un hecho de extrema gravedad para la seguridad y confianza de los inversores”. En particular ante el riesgo de que Redeia “pueda verse expuesta a reclamaciones de millones de afectados en el entorno español, portugués y francés”.
Uno de los accionistas de mayor relevancia tras la SEPI es Pontegadea. Esta sociedad, vinculada a Amancio Ortega, posee el 5% del accionariado. Es, junto a Enagás, con otro 5%, uno de los accionistas de referencia de la entidad. En ninguno de los dos casos ha trascendido cuál es su valoración sobre la gestión realizada por Red Eléctrica durante el apagón.