A la conclusión de una reunión de dos días que ha mantenido el Consejo de Ministros en el castillo de Meseberg, en los alrededores de Berlín, los tres representantes del Gobierno de coalición han presentado un plan de diez puntos y medio centenar de medidas dirigido a mejorar el crecimiento y la competitividad de las empresas en Alemania y ofrecer incentivos fiscales a las inversiones en tecnologías respetuosas con el clima. «Estamos en marcha», afirmó el canciller Olaf Scholz en la conferencia de prensa final, compartida con sus ministros de Finanzas y de Economía, en la que reconoció que Alemania se encuentra en una situación en la que el crecimiento «no es tan fuerte como nos gustaría que fuera».