Y si de una cosa es experto Sánchez es en resurrecciones políticas, puesto que ya son unas cuantas en las que tras darle por muero o amortizado ha salido triunfante y ha destruido a todos aquellos que se equivocaron en sus valoraciones sobre la capacidad del monstruo para regenerarse.
Es comprensible que tanto Feijoo como Abascal no hayan sabido interpretar las señales, ni administrar lo obtenido, pero lo que no es entendible, políticamente hablando, es que ayer, el día menos indicado para mostrar las divisiones o las diferencias, la llamada derecha española haya mostrado sus desnudeces y hayan consentido la euforia de una izquierda que ha perdido las elecciones, aunque no lo quiera reconocer, o si me apuran no sea capaz de asumir que son menos y en cualquier momento se le pueda acabar el momio de gobernar destrozando todo lo logrado en estos años.
Probablemente, el trauma que las derechas independentistas, PNV y Junts estén generando en el resto del país se volverá en su contra en algún momento de la historia, pero en estos momentos nadie debe de olvidar que estamos ante la paradoja de que dos partidos de casi extrema derecha como estos dos, por personalismos puros y duros, están vendiendo su futuro, su propia razón de ser y existir. Para los votantes del PNV compartir toda una manera de entender el pais Vasco con los ex etarras es todo un trago que poco a poco les está llevando a pasar de ir a votar. de ahí que PNV pierda elección tras elección poder y Bildu les esté comiendo el terreno. En las próximas elecciones locales los nacionalistas de don Sabino tendrán que asumir su cuasi desaparición.
Tres cuartas de lo mismo le pasará a Junts que están entregando sus votos a socialistas y populares.
Si con ese trasfondo la derecha es capaz de reagruparse y presentar un frente unido, es probable que la legislatura pueda ser mas corta de lo que Sánchez y sus socios esperan y que incluso no les dé tiempo a destrozar lo poco que va quedando de la democracia inicial en esta España de hoy esclavizada y vejada por la izquierda mas ultra que hayamos conocido nunca jamás.